martes, 31 de diciembre de 2019

La mansión de los chocolates (Maria Nikolai)

Había oído hablar del libro y lo había visto en un montón de sitios, así que he tenido la opción de leerlo y lo he leído. De acuerdo con la sinopsis: "Maria Nikolai nos transporta a la fábrica de chocolates de la familia Rothmann en la ciudad alemana de Stuttgart, en 1903. El negocio está en manos de la misma familia desde hace años y ahora su hija, la joven Judith, aspira a tener un rol importante en la empresa en contra de la voluntad de su padre". He de decir que suena mucho mejor de lo que luego es: la novela está bien, se lee fácil, es entretenida, pero yo esperaba otra cosa.

No deja de ser una novelita rosa en torno a un negocio de chocolate, pasando por temas interesantes pero solo de puntillas.

Por un lado, tenemos a los Rothmann, Willhelm y Hélène, casados por imposición, y con 3 hijos, Judith de 21 años y los gemelos Anton y Karl, de 8 (que, dicho sea de paso, son de armas tomar y les permiten hacer de todo)

Por otro lado, nos encontramos a Victor Rheinberger, hijo de Friedrich Rheinberger, a la sazón teniente general del ejército prusiano. Victor acaba de salir de la cárcel en la fortaleza de Ehrenbreitstein (entre paréntesis... las cárceles alemanas, con esos nombres, dan mucho miedito...)

Y tenemos a varias familias más, de las familias bien de Stuttgart y a sus hijos, como cuenta Edgar Nold: "Max, heredero del exitoso fabricante de maquinaria Ebinger, Albrecht von Brau, retoño del por aquel entonces, banquero más influyente de Stuttgart; y él mismo, el pintor bohemio cuyo padre poseía una fábrica de jabones...". De estos tres, Max es un chulín, mujeriego y conquistador, Albrecht es un imbécil integral y Edgar es el único majete y con sentido.

También tenemos al servicio de los Rothmann: Margarete, el ama de llaves; Dora, la doncella de Judith; Theo, el chófer; Gerti, la cocinera; Robert, el mozo de los recados y Babette, la criada.

Nos presenta en la novela varios problemas sociales, como el que las chicas tuvieran que casarse con quien decidieran sus padres, la diferencia entre las clases sociales, el problema de la prostitución, la situación de la mujer en la sociedad... Pero, solo lo comenta, no hay más profundización, la verdad.

No puedo dejar de incluir aquí una frase de Ebinger que sería para enmarcar: "No tengo ni idea de en qué estaba pensando Dios cuando creó a las mujeres, pero alguna razón habrá tenido". En fin...

Sí me ha gustado la historia de Emil Jellineck: "...se presentó un día en el taller de Maybach y no paró de insistir hasta que le construyeron un coche de carreras de dos plazas con el que participó en el rally de Niza de 1901. Y quedó el primero. Desde entonces, los coches de Maybach se llaman Mercedes en homenaje a la hija de Jellineck". Yo conocía parte de la historia, pero aún así, me ha gustado mucho también esta vez.

Uy... y me he enterado también de que el cristal de Bohemia es vidrio... No sé por qué, yo creía que era cristal tallado... ¡qué cosas!

No puedo contar la historia porque lo destriparía, pero está bien... un poco pastelosa al final, pero bien. Eso sí, no hay lucha para conseguir llegar a participar en el negocio... para nada...

Cierro la última reseña del año con un pensamiento "muy cortito" de Heráclito, con la intención de empezar el nuevo año con, por lo menos, las mismas ganas que este que ahora se acaba: "Todo fluye"

Las trampas del afecto (Mari Jugnstedt)

Empezar esta novela es saber que va a ser entretenida y que lo voy a pasar bien. Me encantan los personajes, a los que ya conozco y normalmente la trama es interesante. Y así ha sido.

Volvemos a la comisaría de Visby y nos volvemos a encontrar con el agente Thomas Wittberg, con el responsable de prensa Lars Norrby, con Martin Kihlgard, del Cuerpo Nacional de Delitos, que colabora con ellos esporádicamente... Y, por supuesto, con el comisario Anders Knutas y con la subcomisaria Karin, de quien he descubierto que "era de baja estatura y solo medía metro y medio" (como yo...)

En esta novela nos encontramos con la familia Ramberg. Son los propietarios de la granja Guastäde, "una de las más hermosas de Gotland". En este momento vive en ella Julia con su perro Mio. Pero sus hermanos Daniel y Maria quieren ponerla a la venta, cada uno por una razón diferente.

La cuestión es que van apareciendo cadáveres y parece que todos están relacionados con la granja... llevando a la policía al otro hermano, Elias, fallecido en Chile escalando una montaña.

No voy a contar qué es lo que pasa, claro, pero es una novela que merece la pena para pasar un rato entretenido y poder sumergirse en otro mundo...

Esta vez no tengo reflexión final pero, para todo aquel que lo quiera leer, hay que prestar atención a Sunnöve y a su hijo Isak. Ella es una mujer ya mayor que vive por y para su hijo, de casi 40 años con una discapacidad psíquica. Es una pequeña historia paralela al resto de la trama y que tiene un final sorprendente.

lunes, 30 de diciembre de 2019

Mademoiselle Coco y la pasión por el nº 5 (Michelle Marly)

Pura curiosidad... eso es lo que me llevó a leer este libro. Me pareció que podía merecer la pena y la verdad es que sí ha sido así. Lo he disfrutado, he aprendido muchas cosas y lo he pasado muy bien leyéndolo.

Coco Chanel se llamaba en realidad Gabrielle... Lo de Coco vino por una cancioncilla con un perrito llamado Coco, como protagonista...

La novela comienza cuando fallece Boy Capel (Arthur Capel), el "amante" de Coco, en un accidente de tráfico. Lo de "amante" suena muy feo pero no sé cómo decirlo. Llevaban juntos mucho tiempo pero él se casó con una aristócrata y tuvo una hija. Eso sí, seguía con Coco mucho tiempo...

Esta circunstancia la sumió en una profunda tristeza... Al final fue saliendo gracias, entre otras cosas a su amiga Misia (Marie Sophie Godebska) que en el momento en el que se desarrolla estaba a punto de casarte con el pintor español Sert. Era además muy amiga de Picasso, del bailarín Diághilev... Y ella era pianista.

Durante toda la novela, Coco Chanel busca EL PERFUME. Un perfume que pueda regalar por Navidad a sus mejores clientas. Por circunstancias, descubre el perfume Le Bouquet de Catherine y piensa que tiene que conseguir uno como este pero "modernizado". Este perfume se había hecho en honor de la zarina Catalina la Grande, "al empezar la guerra le cambiaron el nombre por el del proveedor de palacio y pasó a llamarse Rallet nº 1. Solo podían usarlo las damas de más alta cuna de Petrogrado". En opinión de Coco Chanel: "Una mujer sin perfume es una mujer sin futuro".

Yo conocía poco de la vida de Coco Chanel, pero me ha parecido fascinante. Pasó por un convento después de quedarse huérfana de madre, conoció a Boy quien la ayudó y animó con sus diseños... Luego tuvo una turbulenta relación con Igor Stravinski. Cuando esta finalizó, comenzó una relación con el gran duque Dimitri Pávlovich Románov, primo del último zar y bisnieto de la zarina Alejandra Fiodorovna. ¡Ah! y parece ser que también tuvo un romance con Picasso (se relacionaba bien, eso no se le puede negar)

Era una mujer trabajadora, con unas ideas revolucionarias: "desterró el corsé y confeccionó pantalones de mujer"; "... pijamas cómodos y elegantes con los que las mujeres podían huir a los sótanos durante los ataques aéreos alemanes". Esto sí que me ha gustado... es un poco como lo de Martirio: "con mi chándal y mis tacones, arreglá pero informal"... ¿Qué hay ataques aéreos? No pasa nada... allá vamos, todas monísimas con los pijamas de diseño... a cubierto, sí, pero monas.

Para ella, "las fragancias eran mensajes que emitía la persona que las llevaba" y se dedicó a educar el olfato. Y yo he aprendido cosas interesantes: "... la elaboración moderna de perfumes se originó en la Italia del siglo XVI. En esa época los alquimistas empezaron a mezclar aceites aromáticos que llegaban principalmente de Arabia, y las primeras manufacturas se instalaron en los monasterios".

Claro, esto es un poco como ver Titanic (y eso que yo no la he visto)... todos sabemos que se hunde. Aquí tenemos claro que encontró su Chanel nº5, perfume que mi madre ha usado durante muchísimos años y que seguro que aún tiene en su casa.

Otra cosa que he aprendido es que los ortodoxos se santiguan en orden distinto a los católicos. Al hacer la señal de la cruz, van primero al hombro derecho y luego al hombro izquierdo, al contrario de lo que hacemos nosotros. Me ha hecho gracia porque es una lucha que tenemos con los peques en catequesis... si se enteran, se me hacen ortodoxos...

Voy a cerrar ya, recomendando el libro, que es de verdad interesante y entretenido. Y cierro con un dicho ruso que cuenta el gran duque: "Tener sentido común es bueno, pero es mejor tener un amigo con sentido común"

No mentirás (Blas Ruiz Grau)

Una de las pocas cosas buenas que tienen las redes sociales es que puedes conocer gente que merece la pena. Sí, de acuerdo, no es que haya conocido "personalmente" al autor, pero sí he podido saber de él y conocer sus libros.

Y ha sido un descubrimiento. Me ha gustado muchísimo y me he convertido en una gran seguidora suya, que leeré otras cosas que ya ha escrito y seguiré leyendo lo que vaya escribiendo.

Vamos a entrar en materia. Carlos Lorenzo, 36 años, es un abogado de éxito, con miles de manías (lo que llamaríamos un TOC), tiene que irse a Mors, una localidad en Alicante cuando recibe la noticia del suicidio de su padre. Ahí comienza una aventura que se va complicando cada vez más y que tiene un final impredecible.

Conocemos también a Nicolás Valdés y a Alfonso Gutiérrez, que son nuevos inspectores, recién llegados a Alicante y que están en el momento justo en el sitio preciso para que les encarguen hacerse cargo del caso. Son grandes amigos y comparten piso y quieren labrarse un futuro en la policía. Son estupendos y seguro que protagonizan alguna otra novela del autor. De Nicolás se puede decir: "Y es que, según su amigo (Alfonso), este era su peor defecto, su humanidad".

Claro, he dicho que les asignan el caso... ¿qué caso, si es un suicidio? Lo cierto es que va muriendo gente del pueblo de forma que parece que se trata de un asesino en serie...

Hay otros personajes interesantes, como Gala, la socia-novieta de Carlos, una mujer muy inteligente que a mí, personalmente, me cae fatal. Y Alicia, la sobrina de la dueña del bar en el que paraba Fernando Lorenzo, el padre de Carlos.

¡Ah! Y la doctora Laura Vílchez, una psiquiatra que se ha encargado de tratar a Nicolás en un determinado momento en el que tuvo un problema... Me ha llamado la atención que decían de ella que llevaba "unos tacones de al menos 15 cm". Es un detalle muy tonto pero a mí me cuesta creerlo. Si fuera verdad, sería mi ídolo... Es complicadísimo caminar con esa altura de tacones... más de 11 cm es bastante incómodo para pasar mucho tiempo sobre los tacones.

De verdad que hay que leer esta novela. Está muy bien escrita, los personajes son muy interesantes y muy creíbles y la trama es trepidante.

Y cierro con una reflexión, como casi siempre: "Son nuestros actos los que decidirán, en un futuro, si podemos dormir cuando llegue la noche"


domingo, 29 de diciembre de 2019

El enigma de las catedrales. Mitos y misterios de la arquitectura gótica (José Luis Corral)

Sí, sí, lo sé... hace nada que he hecho una reseña de un libro de este autor... pero es que me encanta... Y este, que no es novela, es igual de bueno, o mejor. Da gusto leer a alguien que conoce tan bien el tema y que lo cuenta de forma que el lector lo entienda y lo disfrute.

Muy, muy interesante. Las catedrales góticas son una maravilla, eso no hace falta que nos lo diga nadie. Pero si te ayudan a saber un poco más, te parecen mucho más maravillosas. "Una catedral gótica puede explicarse como un edificio compuesto por materiales de construcción organizados según unas determinadas técnicas y presentados con un determinado estilo; pero es también un texto semiótico que contiene un mensaje expresado a través de unas claves que es preciso conocer para poder entenderlo en su totalidad".

A lo largo de este libro vamos a conocer a los constructores, los maçons, que eran trabajadores libres o francos... francmaçons o freemasons... ¿a qué suena?

También vemos cómo se va pasando del románico al gótico, a la luz..."... los nuevos templos en los que se adoraba a Cristo deberían reflejar esa luz vivificadora que el fundador del cristianismo encarnada, es decir, el nuevo mensaje del Nuevo Testamento".

Y hay que decir que cualquiera que entre en una catedral gótica, sea o no creyente, siente un algo especial que hace que algo se remueva en nuestro interior. No creo que a nadie le pueda dejar indiferente. "...fueron construidas para asombrar y porque su presencia sigue despertando sensaciones prodigiosas y emociones apasionantes"

Hay una frase en el libro en la que indica lo que dijeron de la catedral de París: "Si este monumento se acabara algún día, ningún otro podrá ser comparado con él". Yo debo decir que no es la catedral que más me gusta de las que conozco, pero es cierto que es una maravilla. Y, ahora, después de que se ha incendiado, es verdad que resulta mucho más impactante leer este libro y ver lo que supuso su construcción... ¡una pena tremenda!

Eso sí, he leído una frasecita de Bernado de Morlaas, que es para hacerle de todo. Yo no sabía quién era, así que lo he buscado y parece que es un monje benedictino de mitad del siglo XII, que era poeta satírico y autor de himnos y libros. Y, además, el muchacho decía cositas como: "La mujer es un ser innoble, pérfido, fétido, infecto y ruin, que mancilla lo que es puro, rumia impiedad y echa a perder todo acto". Vale, en aquella época la mujer no era lo que es ahora, lo admito. Y entiendo que las cosas hay que verlas en la perspectiva del momento histórico pero... vaya... yo creo que el amigo Bernardo se excedió un poquillo, ¿no?

Más cosas interesantes del libro: las reliquias... Es algo que me llama poderosamente la atención siempre que lo veo... La Sainte Chapelle en París es un auténtico relicario... se construyó para albergar las reliquias de la pasión. Pero luego están reliquias como la camisa o túnica que llevaba puesta la Virgen María el día que dio a luz a Jesús, o los restos de los Reyes Magos, que están en la catedral de Colonia... ummmmmm, hay algunas que me llaman mucho la atención... Nunca he sabido muy bien qué pensar.

Ah, y nos habla también del número de Dios, que está muy cerca del número áureo... y que fue descubierto por Leonardo de Pisa, el amigo Fibonacci.

Y luego, todo lo esotérico que gira en torno a las catedrales: "Para los amantes de lo esotérico, la catedral de Chartres actuaría como un gigantesco acumulador de energías y un catalizador de poderosas corrientes telúricas, cuya fuerza benéfica sería descargada sobre los peregrinos transmitiéndoles sensaciones regeneradoras y vitalizadoras"; "Una leyenda sostiene que el lugar donde se alza la catedral de Chartre es el más sagrado de la tierra, una especie de corazón palpitante en pleno centro del mundo".

Hay tantas cosas que para terminar no sé qué elegir. Pero he pensado que esta vez no va a ser una reflexión: "Una vieja tradición cuenta que el demonio había elegido París para desde allí iniciar la corrupción del mundo a fin de establecer en la tierra el reino del terror y de las tinieblas"... A lo mejor es por eso por lo que a mí no me gusta París... algo me decía a mí que no era una ciudad de fiar...



Todo lo peor (César Pérez Gellida)

En cuanto supe que César Pérez Gellida sacaba nuevo libro, no me quedó más remedio que hacerme con él... Y ya, siendo una "continuación" de Todo lo mejor... era una obligación.

Es increíble cómo se puede captar la atención del lector desde la página uno y hacer que uno quiera acabar cuanto antes para saber el desenlace y, por otra parte, no querer que acabe nunca el libro... Y me pasa con todos los de este autor. Creo que ya dije en algún momento que le he conocido hace poco pero soy una admiradora para siempre. Simplemente, me encanta.

Claro, el prota de la novela es Carapocha, que es un personaje espectacular. Y hay varias frases suyas que son para enmarcar. De momento, la que abre la novela: "Cuando la vida quiere ser cruel, no hay mayor crueldad que vivir" y otra que ya conocemos todos sus seguidores: "Todo lo peor es lo mejor cuando a uno deja de importarle de qué lado está".

Me entretengo, me entretengo... En esta novela aparecen unos cuantos cadáveres de homosexuales mutilados en Berlín Este. Pero no quieren considerarlos como una serie de crímenes para que no se considere que en la RDA también hay asesinos en serie. Pero, de repente, aparece muerto Johannes Allendorf, del Departamento Central para comunicaciones Seguras y Protección Personal, que no solo es un hombre que maneja información delicada, sino que es amigo personal del ministro.

Y ahí empieza todo. Hay que buscar al asesino... ¡y vaya asesino!. Como no desvelo nada, es Asa, nombre de un personaje bíblico (quinto rey de la casa de David, bisnieto de Salomón) que hacía "limpiezas". Y el amigo utilizaba la Pera de la Angustia, un "cacharro" en forma de pera, con cuatro pétalos que se abrían desde fuera hasta alcanzar hasta 3 veces su tamaño original y que fue "ideada por las privilegiadas mentes de la Santa Inquisición". La cosita esa se introducía "en la boca si al reo se le acusaba de herejía, en la vagina si se trataba de una sospechosa de brujería y en el ano en el caso de ser la sodomía el cargo que se le imputaba".

Nos vamos a encontrar también a Erika Eisemberg, a Otto Bauer y a su medio hermana Birgit. Y, por supuesto, Viktor Lavrov (Lopategui), nuestro amigo Carapocha.

No se puede contar nada de lo que pasa por varias razones: la primera, que no vamos a desvelar lo que pasa porque el libro hay que leerlo y lo segundo, porque hay varias tramas diferentes que no se pueden resumir en unas pocas líneas... imposible.

Pero lo que sí queda claro es que en aquel momento, 1981, Berlín Este era un batiburrillo de servicios de inteligencia de todos los países habidos y por haber. Debía ser aquello una "fiesta"... con todo lo duro que tuvo que ser vivir en Berlín Este en aquel momento, algunos ratos me daba la sensación de que era un poco como cuando Gila llamaba por teléfono: "¿Es el enemigo? Que se ponga".

Otra cosa muy interesante es la faceta de Carapocha de psicólogo. Experto en psicología criminalística, "disciplina que se centra en analizar los motivos que llevan a una persona a delinquir con el propósito de entender cómo actúa, poder prever sus movimientos y anticiparnos". Una cosa que me ha llamado la atención es que, cuando va a la prisión a ver al asesino Peter Sutcliffe, se da cuenta de que el alcaide de la prisión "calificaba a los presos allí recluidos como "lo peor de la sociedad". ¿Cómo hacerle entender que aquellas personas eran producto de esa sociedad". A mí me ha resultado duro de aceptar, pero creo que es una gran verdad.

Hoy, comiendo con un amigo, ha surgido una cuestión que nos ha llevado a comentar lo que nos dice aquí Carapocha: "Andrópov me dijo que el KGB era un gran pez que no sabe nadar en aguas tranquilas, por eso, si no están turbulentas, mueve la cola para enturbiarlas". Es un poco triste pensarlo, pero es posible que sea esto mismo lo que hacen muchos otros organismos-gobiernos... hacer que las cosas que complique, puede que para ser ellos las que las solucionen... Habrá que darle una vueltecita.

Hay mucchísimas cosas interesantes en este libro, pero no voy a tener la opción de reseñarlas todas, claro... Así que, voy a dejar solo dos. Eso sí, el libro hay que leerlo, no hay excusa.

"Si uno tiene varios frentes abiertos y pretende ganar la guerra, es necesario asumir que lo lógico es caer derrotado en alguno de ellos y que, por tanto, lo único que importa de verdad es poder elegir cuál"

"...los problemas que no tienen solución dejan de ser problemas y por lo tanto no hay que preocuparse por ellos, hay que ocuparse de afrontar la nueva situación y aprender a convivir con ella"

viernes, 27 de diciembre de 2019

Los Austrias. El dueño del mundo (José Luis Corral)

Como era de esperar, tratándose de un libro de José Luis Corral, es una maravilla. Eso sí, como soy un poco tontorrona, este es el tercer libro de la trilogía de los Austrias. Tengo que leer El vuelo del águila y El mundo en sus manos. Tranquilidad: ya los tengo y están en la lista...

En esta entrega, se narran los 20 últimos años de Carlos I de España y V de Alemania, desde 1539 a 1558, y vamos conociendo a todos los personajes que tuvieron un cierto peso en su vida, así como a la familia Losantos, que es ficticia pero que acompaña de maravilla.

Por supuesto, conocemos a Felipe, el príncipe: "De cabello rubio como su madre, ojos de párpados caídos y de natural tristes, frente despejada, nariz recta y gesto noble..." y nos enteramos de que era un hombre muy culto y que su padre quería que se educara en condiciones (era una de sus principales preocupaciones). Una de las cosas que más me ha llamado la atención es que sabía hebreo y arameo... que no debía de ser nada fácil.

Muy interesante conocer a todos los hermanos y hermanas del emperador Carlos, el valor de ser una familia: "...recibían una y otra vez la enseñanza de que su linaje se mantendría en el poder si permanecían unidos, si entregaban toda su vida a la causa de la familia, a la defensa de sus intereses de sangre". Todo por la familia y por mantener el poder...

Curioso también que las mujeres, aun pudiendo ser reinas, no podían tener tanto poder como los hombres: "La reina de Hungría era la más inteligente y sagaz de todos los miembros de la familia Habsburgo. Si hubiera nacido hombre...".

Más cosas interesantes: la situación de la reina madre, la reina Juana... Recluida, ignorada y considerada loca por todos... ¿estaría loca de verdad o les vendría bien a todos que se pensara que lo estaba? Iban a verla de vez en cuando, pasaban por allí, y otra vez encerrada... ¡qué vida tan triste!

Hay tantísimas cosas interesantes que no sé ni cómo empezar. La Historia es increíble y, contada por un autor como José Luis Corral, adquiere tintes impresionantes...

Me ha gustado el lema que hizo suyo el príncipe Felipe: "El mundo no es suficiente"... Ja, ya sabemos de dónde sacó James Bond su peli...

Curioso que en un momento dado se dice: "Las guerras ya no son como antes". Si los pobres levantaran la cabeza, se mueren otra vez...

De todos es sabido que el emperador Carlos tenía muchos problemas de gota... porque no se cuidaba nada y comía y bebía un poco más de lo conveniente. Y leemos: "Han traído una par de barriles de la abadía de Gimbergen de una variedad nueva de color blanquecino". Y desde entonces, todos tomamos Grimbergen...

No voy a contar más cosas, que me alargo mucho, pero este libro sí que hay que leerlo. Merece muchísmo la pena. Y cierro con un consejo que le dieron al príncipe Felipe: "Rodéate de los mejores, dispón espías en todas partes, que te mantengan informado de cuanto pasa hasta en el más alejado rincón de tus reinos. Nunca te relajes, nunca dejes para mañana lo que puedas resolver hoy. Sé constante y paciente, prudente pero firme."

El chocolate no hace preguntas (Yolanda Quiralte)

Vamos a ver, ya el título prometía que no iba a ser una novela filosófica para pensar y dar un vuelco a la vida... Y así ha sido, pero ha habido ratos en los que me he reído.

Me gustó porque el prota, Bruno García, ha montado una librería "con tintes neoyorquinos" (que no sé muy bien qué es eso) y es un enamorado de los libros.

La chica, porque aquí tenía que haber "una chica" es Sara Bueno, de 33 años, que es neurocirujana. Curiosamente, estaba presente en un accidente de tráfico en el que falleció Mario Bueno, el padre de Bruno. Por supuesto, ella eso no lo sabía en aquel momento... En fin, luego se entera, no quiere que Bruno lo sepa, pero luego se lo quiere contar...

Es una novela romántica de enredo, divertida, con personajes muy curiosos. Algunos, hasta estupendos.

La mejor de todos es Maika, la dependienta de la tienda de Bruno: "Le encantaba estudiar y tenía una memoria prodigiosa para recordar datos y cifras, y mucho más si estos tenían relación con los libros, la auténtica pasión de su vida desde que tenía uso de razón". Es una muchacha con síndrome de Asperger, que ha tenido una infancia un poco complicada por un padre "difícil". Y a mí me cae muy bien. Sobre todo, cuando dice eso de: "...y, además, has doblado la esquina de varias páginas, ¡¡¡ME MUERO DEL PARRAQUE!!!". Eso mismo me pasa a mí, me identifico plenamente...

Aparecen otros personajes muy divertidos, como Aurora, la amiga de la infancia de Sara; o Greta, otra amiga; y Chuso, otro amigo más que se vuelve loco cuando encuentra en la librería el libro Si la lentejuela te falla, el glamour te estalla".

La novela no da para más... pero he pasado un rato entretenido... Y cierro con la frase de Bruno cuando está deprimido y se pone ciego de chocolate: "¡El chocolate no hace preguntas!"

miércoles, 25 de diciembre de 2019

La Casa Alemana (Annette Hess)

Llevaba tiempo viendo este libro en todas las listas y en todos los escaparates así que, cuando tuve la oportunidad, decidí leerlo.

He de decir que no me ha gustado mucho... No sé muy bien por qué pero me ha resultado lento, largo y un poco "cogido por los pelos"... Siento decirlo pero no es una de mis recomendaciones del año.

Nos situamos en 1964: La Casa Alemana es un restaurante regentado por la familia Bruhns: el matrimonio Ludwig y Edith, con sus hijas Annegret y Eva y el pequeño Stefan. Nuestra protagonista es Eva, la hija más joven que trabaja para una agencia de traducción y, por circunstancias acaba trabajando como traductora en el primer juicio de Auschwitz.

Eva va descubriendo qué es lo que pasó en realidad en los campos de concentración que era algo que se decía pero que ella nunca había pensado que pudiera haber sido real. Y descubre también cosas de su familia que hacen que se desmoronen todos sus esquemas.

No ayuda nada su novio, la verdad, Jürgen Schoorman. Es un ex estudiante de Teología que deja la carrera para trabajar en la empresa de su padre cuando este cae enfermo. Es la primera empresa de venta por catálogo y funciona de maravilla. Pero Jürgen es desagradable (o a mí me lo parece) desde que aparece por primera vez en el libro.

Por otro lado, a mí me parece que las reacciones de Eva ante cualquier circunstancia son exageradas. Cierto es que hay que verse en la situación para ver cómo reaccionaría uno... pero a mí ella me parece que sobreactúa. Vaya, que la autora hace que sobreactúe, por supuesto.

Ya he dicho más de una vez que este tema no me gusta especialmente porque ya se ha tratado de tantas maneras que algunas ya cansas (dejando claro, por supuesto, que es algo que debemos tener siempre presente para que JAMÁS vuelva a repetirse). Así que, esta novela no he dejado buen sabor de boca y creo que habiendo tanto que leer y tanto dónde elegir, no ha sido una buena opción.

Eso sí, dejo una reflexión final de Walther Schoormann, el padre de Jürgen, que es un hombre interesante: "Ser persona es difícil"

El heredero (Jo Nesbo)

Esta es la primera novela que leo de este autor, pero estoy segura de que no va a ser la última... Me ha gustado mucho, la verdad.

Tiene unos personajes muy interesantes, una trama que engancha de principio a fin y un final más que sorprendente. Total, que lo tiene todo.

Nos encontramos con una trama de prisiones, policías corruptos, problemas de salud,... y sentimientos muy profundos que se trasladan al lector como si fuera él mismo el que los estuviera experimentando.

Nuestro prota es Sonny, un muchacho que está en la cárcel, con el estigma de ser el hijo de un policía corrupto, Ab Lofthus. Eso le lleva a atravesar una serie de situaciones muy complejas y termina en la cárcel siendo una especie de "chamán-mesías" (llámese como sea) que escucha a todos los presos "en confesión".

Ahí descubre que ciertas cosas que le han contado no son ciertas y decide escapar de la cárcel. Y es ahí donde empieza la aventura.

Vamos a conocer a Simon Kefas, el policía "prota", que es ex-adicto al juego, aunque sabe que su problema está ahí agazapado para volver a aparecer en cualquier momento. Y a Else, su mujer, que padece una enfermedad ocular que está haciendo que vaya a quedarse ciega... Un problema que podría solucionarse con dinero (¡qué pena!)...

También conoceremos a Kari Adel, nueva en homicidios, que va a tener que ser la compañera de Simon, sin que a ninguno de los dos les convenza mucho esta circunstancia.

Hay un personaje curioso, Arild Franck, el director adjunto de la cárcel, al que: "...a veces incluso le indignaba que la policía fuera incapaz de atraprlo a él, un corrupto dirigente de un centro penitenciario"

Y también está Martha, la muchacha responsable de un "centro" de acogida muy peculiar, al que acuden fundamentalmente drogadictos y donde acaba Sonny, aunque con un nombre falso (como casi todos los que aterrizan allí). Una muchacha entregada y luchadora con un novio intransigente y posesivo (no le soporto...) que descubre en Sonny algo de los que siempre había buscado.

Bueno, y no puedo dejar de nombrar a Pelle Granerud, el taxista... un personaje secundario pero realmente maravilloso. Explica a Sonny cómo saber si alguien te quiere: "Es la suma de todas esas pequeñas cosas que no puedes señalar con el dedo"

Es una trama compleja pero muy bien armada que te hace no poder dejar el libro y enfadarte cuando al final lo consigues terminar.

Cierro con una reflexión, como siempre. Y me parece muy interesante: "La responsabilidad de los hijos no es ser como sus padres, sino ser mejores que ellos".


martes, 24 de diciembre de 2019

Sidi (Arturo Pérez Reverte)

Cierto es que soy una lectora "entregada" de Arturo Pérez Reverte, así que es evidente que el libro me tenía que gustar (como así ha sido). Pero es que este es fantástico, de verdad... he disfrutado muchísimo con la lectura.

Siempre he tenido una historia de amor-odio con el Cid, tengo que reconocerlo. En algunos momentos me encantaba y en otros me parecía que era un mercenario y bajaba muchos escalones en mi valoración.

Con el tiempo la idea se ha ido afianzando en mí y ahora ya me parece un gran hombre, con sus luces y sus sombras, pero en conjunto, un hombre admirable.

Y en esta novela (sí, lo sé, es novela) me he convencido más de la idea que ya había ido yo reposando estos últimos años.

Es una novela para disfrutar desde el principio hasta el final. Conocemos a Ruy Díaz, Álvar Fáñez (Minaya), a Martín Antolínez, a Yaquib al-Jatib... y a tantos otros que nos explican cómo se vivía en aquella época... Sobre todo, cómo vivían los hombres de armar... Una vida realmente dura.

Y el Cid nos da lecciones de liderazgo desde el primer capítulo hasta el último. A mí me llamó mucho la atención, la verdad. Y hace muy poco lo vi en una reseña en twitter. Lamento no recordar de quién era, pero era estupenda.

Dejo dos ejemplos de lo que es ser un líder: "Jamás, desde que guerreaba, había ordenado a un hombre algo que no fuera capaz de hacer por sí mismo"; "Nunca dejaba a uno de los suyos solo entre enemigos, ni nunca atrás mientras estuviera vivo". Hay otros muchos pasajes pero estos me han parecido muy ilustrativos. No es igual obedecer por temor que por respeto...

Me ha hecho gracia una copla de los hombres de armas, de los pobres que vivían de su montura y sus armas lucha tras lucha, lejos de casa y familia, por una pequeña recompensa

Por necesidad batallo
y una vez puesto en la silla
se va ensanchando Castilla
delante de mi caballo.

Hay dos pasajes de la novela que me han encantado y que tuve que releer. Por un lado, la compra de Babieca... me encanta cómo elige al caballo. Y por otro, aunque cuente algo que no debería, un pasaje maravilloso de leer es la muerte de Yénego Téllez... un muchacho estupendo.

Ah... y muy curioso cuando aparece la Tizona, la famosísima espada. Está en manos del conde Berenguer Remont: "Perteneció a un rey moro y después a mi familia"...

Otro personaje interesante es Raxida, hermana de Mutamán... Es curioso como describe el harén perfecto: "Para el amor, lo mejor por temperamento es una bereber; para tener hijos, una andalusí; y para llevar bien la casa, una cristina".

Entre miles de cosas, hay varias lecciones de vida y una de ellas tiene que quedar aquí para que la tenga presente: "Cuanto más se suda en la guerra, menos se sangra en ella".

Y cierro ya, recomendando que se lea la novela sí o sí. Y dejo una frase que ya conocía pero que creo que es una gran verdad: "A veces, cuando Dios tiene ganas de broma, castiga concediendo lo que se desea"

sábado, 21 de diciembre de 2019

De cómo un rey perdió Francia - Los Reyes malditos VII (Maurice Druon)

Fin de la serie... Y es una pena porque es la que menos me ha gustado. Ya no se trata de una novela histórica como tal, sino que es la narración de los hechos... Y pierde fuerza.

Estamos a mediados del siglo XIV y nos cuentan el reinado de Juan II, Juan el Bueno, que yo creo que no era tan bueno. Y las cosas, la verdad, no iban nada bien...

Y, como no iba bien, aparece la peste para ayudar un poco más... Y me ha hecho gracia una frase: "Felipe de Valois tenía un hijo y, por desgracia, la peste no se lo llevó"

Me he enterado aquí que hubo un momento en que el año empezaba un día diferente en cada país y me ha llamado la atención. Yo creía que el comienzo del año en enero databa de los romanos. Ellos comenzaban el año en marzo (en los idus de maro), nombrando los cónsules, que organizaban las campañas y enviaban las tropas a sus cosas... pero, como en la Península Ibérica les estábamos dando la lata, tuvieron que nombrar los cónsules en enero para poder mandar las tropas antes a ver si conseguían doblegarnos.

Y veo aquí que no era así... Voy a tener que investigar un poco más...

Como en otras de las entregas de esta saga, el autor nos da unas cuantas lecciones. Me ha gustado mucho una frase de Eduardo III: "Cuantas menos palabras uno pronuncia, menos serán repetidas y menos serán falseadas". Inmediatamente he pensado en las redes sociales, no sé por qué...

También nos da lecciones en cuanto al poder: "Todo se derrumba cuando los ineptos se suceden en la cúspide del estado"... ¡qué miedo da eso!

En fin, como esta novela me ha llamado menos la atención, me voy a entretener menos con ella y voy a cerrar ya pero con otra frase absolutamente lapidaria: "Las tragedias de la historia revelan a los grandes hombres, pero los mediocres son quienes provocan las tragedias".

La flor de lis y el león - Los Reyes malditos VI (Maurice Druon)

Hay que reconocer que es muy interesante leer cualquier serie "del tirón". Así no se pierde la idea original. Y con esta me está pasando eso, que los leo sin tregua y parece que es un único libro muy largo...

Vamos avanzando en el tiempo: "24 de enero de 1328. Ante monseñor William de Merlton, arzobispo de York y primado de Inglaterra, el rey Eduardo III, que no tenía aún dieciséis años, se desposaba con Felipa de Hainaut, su prima, que apenas contaba catorce". Lo primero... ¡qué pena de juventud! Sí, ya sé que era así, que la esperanza de vida era otra... sí, sí,... pero ¡qué pena de juventud! Y, lo segundo, ¡se llama Felipa! Sí, como mi abuela... y eso que no es un nombre muy común... Como dice mi madre, ¡menos mal que a ella no se lo pusieron por mi abuela!

En fin... que la cosa con los reyes de Francia no se estaba poniendo muy bien, la verdad: "Luis el Turbulento había muerto a los 27 años por una mano criminal. Felipe el Largo había fallecido a los 29 por haber bebido en Poitou agua de pozos envenenados. Carlos IV había resistido hasta los 33; era el límite. ¡Es bien sabido que los maldecidos no pueden sobrepasar la edad de Cristo!". ¡Eso sí que no lo sabía yo! Pobrecillos... ahí, esperando a llegar a los 33 para ver si sobrevivían o si de verdad la maldición del Gran Maestre de los Templarios se los llevaba por delante... ¡qué sinvivir!

En esa entrega de la serie vamos a ver como se elige a Benedicto XII. Muy curioso, porque fue un poco por error. Nadie quería que fuera papa pero todos le votaron por no votar a otro y que resultara elegido... cosicas del poder... Pero, según vemos "...demostró bien pronto ser un Papa de paz". Algo es algo, que tal como estaban las cosas, lo de ser hombre de paz no era baladí.

Y también vamos a ser testigos de la muerte de Roberto de Artois. Sí, lo cuento... tampoco pasa nada. El hombre se tenía que morir en algún momento y se puede recurrir a la historia para saberlo. Es un personaje tan interesante... Muy curioso.

Por otro lado, estos libros deberían ser de lectura obligatoria para los que quieren ser dirigentes de un país. Lo digo porque llevamos una temporadita que sí que no con la gobernabilidad y nos tienen a todos un poco hartos. Sobre todo porque no les importamos lo más mínimo: solo les importa su propio estatus-poder-ego-orgullo, llamémoslo como queramos. "El poder sin el consentimiento de aquellos sobre los que se ejerce es un engaño que no puede durar largo tiempo, un equilibrio eminentemente inestable entre el miedo y la rebelión, que se rompe de golpe cuando unos cuantos hombres se percatan de que comparten el mismo estado de espíritu". A mí me ha dado que pensar, la verdad.

Y no digamos esto de: "El poder corrompe rápidamente a quienes lo detentan sin ser movidos ante todo por el bien público". Ahí lo dejo... ¡no digo más!

También me he llevado un disgustillo... "33 años es una edad en que todas las mujeres, incluso las más perversas, contemplan las dos vertientes de su vida, piensas con nostalgia en la época pasada, y con inquietud en la que ha de venir." Madre mía, que yo no me acuerdo si me hice esa reflexión en aquel momento... Supongo que sí, pero no por la edad, sino porque estaba embarazada de mi hijo mayor y eso sí que te hace replantearte la vida. Pero vamos, que de lo que se trata aquí es de ver los 33 como el punto medio de la vida... y eso, cuando ya hace 20 años que los cumpliste, da un poco de vértigo.

No me entretengo más. Sé que no he contado nada de la novela, pero para eso está, para que todo el mundo la lea. A mí me hacen reflexionar muchas cosas y al final, eso es lo que cuenta.

Y cierro con otro pensamiento que también me ha parecido muy interesante: "Todo hombre viene al mundo para una función, ínfima o importante, desconocida generalmente por él mismo..."

lunes, 9 de diciembre de 2019

La loba de Francia - Los Reyes malditos V (Maurice Druon)

La loba de Francia es Isabel, la hija de Felipe IV casada con el rey inglés y, por tanto, reina de Inglaterra. La verdad es que es la única de sus hijos que parecía valer para algo... Eso sí, a mí no me cae muy bien, ¡qué le vamos a hacer!

Y es aquí donde empieza a tener fuerza Inglaterra, empiezan a aparecer ingleses desde que conocemos a Lord Mortimer, Roger Mortimer de Wigmore, que estaba preso en la Torre de Londres y logra escapar.

Nos encontramos en 1323 y nos enteramos de que París tenía unos trecientos mil habitantes y Londres no pasaba de cuarenta mil... No soy nada amiga de los franceses y París no es ni de lejos la ciudad que más me ha gustado de las que conozco (que tampoco son tantas) pero hay que romper una lanza en su favor: hay una diferencia interesante, la verdad.

En un momento dado dicen algo de Lady Despenser: "...sin ser desgraciada físicamente, estaba marcada por la fealdad que proviene de un alma perversa". Lo dejo aquí porque yo siempre he pensado que es así: cuando alguien es malo, pero malo de verdad, no puede ser verdaderamente bello... Hay algo que lo impide... será la mirada, la actitud, la forma de actuar... pero algo hay, es inevitable.

Una de las cosas curiosas de esta entrega de Los Reyes malditos es que en 1324 se disparó el primer cañonazo, en la batalla de Crecy: "Todos quedaron espantados, y las mujeres corrieron hacia las iglesias para rogar a Dios que apartara aquella invención del demonio". Si los pobres aparecieran ahora por alguna batalla...

Y hay algo también muy interesante que deberían leer nuestros "gobernates" (entre comillas, porque no sé si se merecen esto...): "Escuchar antes de hablar, informarse antes de juzgar, comprender antes de decidir y tener siempre presente que en todo hombre se encuentra la fuente de las mejores y de las peores acciones: estas son para un soberano las disposiciones fundamentales de la prudencia".

Hay muchísimas cosas muy interesantes pero voy a ir cerrando ya, eso sí, con una reflexión, como casi siempre, que tenía mucho más sentido en aquella época que ahora, pero que nos viene bien a todos: "¡Qué maravillosa sensación podía proporcionar a veces el mero hecho de vivir!"

La ley de los varones - Los Reyes malditos IV (Maurice Druon)

Este título nos da también bastantes pistas... Y a mí me ha llamado la atención porque no sabía de dónde venía la ley sálica.

Al parecer esta ley data de los francos salios allá por el siglo V. Pero luego se dejó de tener en cuenta hasta el momento en el que nos encontramos en este libro, 1316, para que no pudiera reinar una mujer. La cuestión es que manipularon todo como quisieron de tal forma que pudiera acceder al trono Felipe V, el Largo, Felipe de Poitiers. "Nadie pensó en objetar que la dinastía merovingia no procedía de los salios, sino de los sicambrios y de los brúcteros, y en aquel momento nadie fue a examinar aquella famosa ley sálica, que se inventó pretendiendo referirse a ella, y que iba a hacer fortuna en la Historia, después de haber arruinado al reino con una guerra de cien años."

Pues así estamos... esta ley se ha ido aplicando por gran parte de Europa cuando les ha ido interesando.. esas cosas que pasan.

En fin, que me he liado con la ley sálica y no he contado que comenzamos con la muerte de Luis X: "El diodécimo rey había reinado 18 meses, 6 días y 10 horas, justo el tiempo suficiente para que este mezquino monarca pudiera destruir gran parte de la obra de su padre". Por si alguien tiene dudas, el autor no es un gran admirador de Luis X... A mí tampoco me ha caído bien mientras ha aparecido en la novela, es cierto, pero puede que el autor haya tenido parte de culpa...

Nos encontramos a la pobre Clemencia de Hungría viuda, con 23 añitos... Era la que decíamos en la novela anterior, que se creía que quedaría para vestir santos porque no tenía marido con 22 años... ¡criaturita! Y, además, a las reinas de luto las vestían completamente de blanco... Blanco, sí, menos tétrico que el negro, pero aisladas y muertas en vida.

Eso sí, como estaba embarazada, le pusieron a Hugo de Bouville, "antiguo Gran Chambelán de Felipe el Hermoso, fue nombrado curador del vientre". Es otra de las cosas que he aprendido. Yo no sabía que ponían a alguien para que se hiciera cargo del futuro rey o reina... ¡qué cosas! Velaba para que al "vientre" no le pasara nada. Por proximidad, claro, también cuidaba de la reina, pero era lo de menos.

Durante esa época se tenía que elegir al nuevo papa, pero los cardenales no estaban muy por la labor, así que medio engañados, Felipe de Poitiers les encerró a todos juntos y les dejó unas instrucciones muy claras: "... si al tercer día no habéis logrado poneros de acuerdo, solo recibiréis un plato de comida diario, y a partir del noveno día estaréis a pan y agua". Claro, de allí salió Juan XXII, ¡faltaría más! Era el cardenal Duéze, curioso personaje que propuso poner impuestos a los pecados, sabiendo que sería una fuente inagotable de ingresos.

Como ya he dicho en más ocasiones, esta serie de novelas es una fuente de cosas nuevas que aprender, algunas muy curiosas: "La ablución por inmersión completa en agua fría se practicó hasta comienzos del siglo XIV. Un sínodo celebrado en Rávena en 1313 decidió, por primera vez, que el bautismo podía administrarse igualmente por aspersión, si había penuria de agua bendita o si se temía que la inmersión pudiera perjudicar la salud del niño". No me lo había planteado yo nunca, claro, pero más de un chiquitín no sobreviviría a una inmersión en agua fría... ¡pobrecitos!

Es en esta entrega en la que conocemos la leyenda del rey que fue cambiado siendo bebé para evitar su muerte... Interesante, muy interesante.

Y cierro ya, con una reflexión de Felipe V: "¿Son todos ellos como yo, criminales si se les presenta la ocasión, inocentes solo en apariencia y dispuestos a obrar mal para satisfacer su ambición?

sábado, 7 de diciembre de 2019

Los venenos de la corona - Los Reyes malditos III (Maurice Druon)

Atención, atención... que este título también nos puede dar alguna pistita...

Claro que, en aquel momento, lo de envenenar a alguien, fuera quien fuera, estaba a la orden del día y pasar, pasar... pasaba poco.

En esta tercer entrega vamos a encontrarnos personajes a los que hemos ido conociendo en las otras anteriores, como Guccio y Maria de Cressay, que son algunos de los ficticios de estas novelas y que protagonizan una historia de amor-desamor, desgracia y leyenda que resulta muy interesante (y que no voy a desvelar para que haya que leer la novela).

Pero Guccio merece mención especial por ser lombardo, banquero... Y vemos en toda la serie la influencia que tenían en aquel momento, por todo lo que le prestaban a la nobleza y a la realeza.

Vamos a conocer a Clemencia una princesa de 22 años... "A los 22 años cumplidos me desesperaba por no tener marido. Creía que ya no lo encontraría y que habría de entrar en un convento"... ¡Madre mía!... ¡Con 22 años! Hay que ver cómo cambian los cuentos. Sí, de acuerdo, la esperanza de vida no es la misma, ya... Eso sí, estoy pensando que como lean esto algunas de las feministas, retiran el libro de las librerías...

Me ha llamado la atención una expresión de Mahaut (que sigue apareciendo y sigue siendo mala, mala, malísima): "Que san Druon me proteja". Claro, me ha llamado la atención porque es el apellido del autor y yo no sabía que había un santo de ese nombre. El autor cuenta después un poco de su vida y yo he buscado algo más... Su festividad se celebra el 16 de abril (día de 1186 en el que falleció). Por lo visto nació por cesárea cuando su madre ya había fallecido y él se sintió siempre culpable por ello. peregrinó a Roma para conseguir el perdón del papa y luego se dedicó a cuidar del ganado de diferentes señores. Al parecer los ángeles cuidaban de las ovejas para que él pudiera orar. También se dice de él que tenía el don de la bilocación. Es abogado de pastores y camareros. (Al parecer, en español es San Drogón)

He descubierto que "oriflama" viene de or-y-flambe (ya se me podía haber ocurrido...), una larga banda de seda roja bordada de llamas de oro.

Nos cuentan en el libro algo que podían ponerles a nuestros políticos actuales en todas las paredes de sus despachos, del Congreso, del Senado y hasta de la cafetería: "De todas las actividades humanas, la de gobernar a los semejantes, aun siendo la más envidiada, es la más decepcionante ya que nunca tiene fin y no permite al espíritu ningún reposo". Vamos, lo mismito que piensan los nuestros, que solo quieren gobernar para su propio beneficio...

He aprendido también lo que es una misa árida, que se celebraba en los barcos: "... el sacerdote no consagraba ni comulgaba. Esta desacostumbrada forma litúrgica se debía probablemente al temor de que por el mareo, fuera arrojada la Sagrada Forma".

Y cierro ya con una reflexión interesante, de esas que dan que pensar: "Es un gran acto de sabiduría y piedad por parte del Creador, habernos impedido conocer el porvenir, al tiempo que nos ha otorgado las delicias del recuerdo y la ilusión de la esperanza"

La reina estrangulada - Los Reyes malditos II (Maurice Druon)

Afortunadamente para mí, leo más rápido que hago reseñas... Hay que ver lo pesadita que estoy... Y quiero ponerme al día antes de terminar el año... ¡ya me puedo dar prisa!

En fin, vamos con la segunda entrega de esta súper serie de siete, que me ha gustado también muchísimo.

Nos ponemos al día: "El rey de hierro acaba de morir. Su muerte llega a casi seis meses de la de Guillermo de Nogaret y a siete meses de la del papa Clemente V". Felipe IV tenía 46 años y llevaba 29 de reinado. Deja como sucesor a su hijo Luis X que no era gran cosa (en el libro no lo dice así, claro, pero es un buen resumen) y que tenía a su mujer en la cárcel por adulterio: Margarita de Borgoña.

Si miramos el título con atención (je, je) puede que nos dé una pista de lo que puede que pase a lo largo de esta entrega...

Como en todas las entregas, se aprende muchísimo y me da mucha pena tener memoria de pez porque sería genial acordarme de todas estas cosas.

Por ejemplo: "En el siglo XIV los 3 principales oficiales de la corona eran: el Condestable de Francia, jefe supremo de los ejércitos; el Canciller de Francia, que retenía la justicia, los sellos, los asuntos eclesiásticos, lo que en la actualidad se llamaría negocios extranjeros; el Primer Maestresala de la Casa Real, que gobernaba a todo el personal noble y plebeyo que rodeaba al soberano".

Hay cosas interesantes, como el hecho de la consanguinidad en las casas reales. Volveré al tema porque he leído hace poco otro libro de la casa de Austria... y les pasa lo mismo. Hay tanto "teje-maneje" con boda por aquí para tener este reino por acá y boda por acá para conseguir ese reino por aquí, que al final todos son primos, sobrinos,... y no son hermanos porque ahí ya les daba vergüenza.

En un momento del libro se dice: "Si de vez en cuando no se colara entre ellos el fruto de algún pecado o de un casamiento morganático, pronto se les vería extinguirse de escrófula y de debilidad"

Y otra cosa: "La dinastía de Anjou-Sicilia, fabulosamente fecunda, llegaría a totalizar, en toda su duración, doscientas noventa y nueve coronas y doce beatificaciones". En cuanto a las coronas, todo me parece perfecto, pero en cuanto a las beatificaciones... no pongo yo en duda nada, ¡válgame Dios!, pero no me queda claro si llegarían muchos al nivel... Con los contactos que tenían en el papado... ¡a saber!

Una de las cosas que más me llaman la atención de estos libros es la importancia de algunos lugares que no son tan conocidos, como Carpentras, donde se celebró el Cónclave para la sucesión de Clemente V. Lo más curioso es que había oído hablar de Carpentras unos días antes de leerlo porque resulta que tenemos ahí un cliente... ¡mis franceses, lo que me hacen aprender...!

Más cosas curiosas, que no me sorprenden, claro, pero me siguen llamando la atención. Habla de las reliquias... "Esto fue ocasión de uno de los comercios más prósperos a través de los siglos XI, XII y XIII e incluso durante el XIV. Todos traficaban con los santos vestigios..." Lo del comercio me parece fatal pero... ¡vaya cosas que se tenían como reliquias! Vamos a ver... ¡cómo se puede tener una ampolla con leche de la Virgen! (por ejemplo, que hay muchas cosas así...)

Lo dejo ya, que me entretengo mucho, como siempre. Y cierro con una reflexión que nos puede dar que pensar: "Todo acto injusto, aun cometido por una causa justa, lleva en sí la maldición"

domingo, 10 de noviembre de 2019

El rey de hierro - Los Reyes Malditos I (Maurice Druon)

He de decir que no conocía esta serie histórica y fue mi jefa la que me lo comentó. Luego resultó que mi compañera Elena la había leído un par de veces y también me dijo que merecía la pena, así que... no me quedó más remedio que buscarla y leerla. Y este es el primero de los libros.

Para ponernos en situación, la serie comienza con Felipe IV, Felipe el Hermoso, y nos lleva por los cinco último reyes de la dinastía Capeto y los dos primeros de la casa Valois. Toda una amalgama de intrigas, guerras, negociaciones, con venenos y adulterios de por medio, que nos demuestra que la realidad supera a al ficción. Bien es verdad que la serie es novelada y que algunas de las cosas que cuenta son "leyendas urbanas"... pero, vaya, era muy interesante vivir en aquellos momentos.

Tengo que confesar que Felipe IV es un personaje por el que nunca he tenido una gran simpatía. Al parecer, además de guaperas, era un buen gobernante y un buen estratega pero... a mis ojos cometió un gran error: acabó con los Templarios... ¡eso no se lo perdono! Porque yo, de haber nacido en aquella época y ser hombre, habría sido Templario... "La soberana Orden de los Caballeros del Temple de Jerusalén fue fundada en 1128 para asegurar la custodia de los Santos Lugares de Palestina y proteger las rutas de peregrinaje"

La novela comienza con la ejecución de Jacques de Molay, el último Gran Maestre de la Orden de los Caballeros del Temple que los maldijo hasta la séptima generación...

El viernes 13 de octubre de 1307 (de ahí que el viernes 13 sea día de la mala suerte), Felipe IV hizo detener a todos los templarios de Francia. "El drama se inició el día en que Felipe el Hermoso pidió ingresar en la Orden, con la evidente intención de convertirse en Gran Maestre. El cabildo había respondido con una negativa tajante y sin apelación".

Claro que, ya en la hoguera, Jacques de Molay les dijo al papa Clemete V, al guardasellos real, Guillermo de Nogaret y al rey, Felipe IV: "¡Antes de un año yo os emplazo para que comparezcáis ante Dios, para recibir vuestro justo castigo!"... Y se cumplió... Bueno, y al papa, cuando estaba en su lecho de muerte, para tratar de curarle le dieron esmeraldas trituradas... ahí lo dejo, que no sé si es peor el remedio que la enfermedad.

En fin, una novela muy interesante, que nos presenta personajes curiosos, como los hijos del rey, sobre todo su hija Isabel, casada con Eduardo II de Inglaterra. Y Roberto de Artois, primo de la familia... ¡vaya personaje! Su tía Mahaut tampoco tiene desperdicio, así como Beatriz de Hirson, su primera dama de compañía, que era una bruja piruja.

¡Qué trajín se traen!: yo te cuento para que tú cuentes, y si tú dices, yo hago esto o lo otro, lo niego, lo juro sobre la Biblia, ¡qué más da! Pero quiero mis tierras y las tuyas porque dan más dinero... Y los súbditos... ¡esos no importan!... En realidad, no se diferencia mucho de la política actual, a excepción de los asesinatos... en eso hemos mejorado un poquillo, es verdad.

Y se aprenden muchísimas cosas en el libro porque las notas son interesantísimas. He aprendido que Eduardo II fue el primer Príncipe de Gales antes de llegar al trono: "...contaba 3 días de edad cuando los señores galeses acudieron a su padre, Eduardo I,para pedirle que les diera un príncipe que pudiera comprenderlos y que no hablara ni ninglés ni francés. Eduardo I dijo que iba a complacerles y les indicó a su hijo , que no hablaba aún lengua alguna".

Podría estar escribiendo y escribiendo de todo lo que me ha llamado la atención y de todo lo que me ha hecho consultar más cosas, pero me alargaría más de lo normal (que ya es mucho decir). Así que voy a terminar con una frase del propio Felipe IV. Ya he dicho que no me cae especialmente bien pero, visto lo que vino detrás, tampoco estaba tan mal...: "Propio es de hombres fuertes no desconocer las dudas y titubeos, que son patrimonio común de la naturaleza humana, sino sobreponerse rápidamente a ellas."

viernes, 1 de noviembre de 2019

El final de Sancho Panza y otras suertes (Andrés Trapiello)

¡Entrada número 500! Tenía que hacer algo para celebrarlo pero ni siquiera me había dado cuenta de que estaba tan cerca hasta ahora mismo.

Eso sí, menos mal que me ha tocado con un libro estupendísimo... si me llega a tocar con uno de esos que son para olvidad, me habría enfadado mucho.

Lo primero que hay que decir es que al autor hay que leerlo, es una obligación. Es una maravilla cómo maneja el lenguaje. Además, adora El Quijote... y cuenta cómo lo leyó por primera vez. Yo también lo leí por primera vez cuando era muy cría en una edición que tengo con mucho cariño (aunque tengo alguna más) y me encantó leer la versión de Trapiello.

Lo que no sabía es que hay un libro anterior a este que estoy reseñando, Al morir don Quijote, que tendré que localizar para leer.

En este libro nos encontramos a Sancho, al bachiller Sansón Carrasco, a Antonia Quijana, la sobrina de don Quijote y al ama Quiteria, que se marchan a las Indias. Es toda una aventura, el viaje, la gente a la que se encuentran, cómo se enfrentan a las nuevas costumbres de América... un mundo nuevo...

Es una delicia leerlo, de veras...

Y me ha dejado muchas cosas para pensar. Por una parte, una reflexión sobre el pecado de vanidad: "...es, con el de la envidia, el más tonto de los pecados, pues a quien lo comete no le aprovecha, sino al contrario, ve cómo la impaciencia y el desasosiego le van royendo el corazón hasta acabar pudriéndoselo". Esto lo debería leer mucha gente, para interiorizarlo y cambiar de actitud...

Divertido lo que dice Sancho cuando le dicen que no parece él, que parece mucho más cuerdo y que utiliza menos el refranero: "Y para que vea en una muestra si soy o no el mismo, le digo que de casta le viene al galgo ser rabilargo y quien tiene arte va por toda parte, y más vale saber que haber, y sí es verdad que entonces era y ya no soy, pero tras un tiempo viene otro, y agradezco de vuestra merced tanto requiebro, pero no está ya el alcacer para zampoñas y cada uno es como Dios le hizo, y aún peor muchas veces". Así... del tirón... ese es mi Sancho.

Esta vez sí que tengo reflexión para terminar. Y, claro, tiene que ser una reflexión de Sancho: "Sin saber quién soy, no podré saber nunca quién quiero ser. Con ser Sancho no me basta. Rían otros con él, que a mí me quedan muchas veras"

La inquietud de los muertos (Simon Beckett)

No tenía ni idea de que estaba leyendo uno de los libros de la serie del Dr. David Hunter. Lo pedí al Círculo de Lectores (el penúltimo... ya me he dado de baja) porque me parecía que podía ser muy interesante.

Y resulta que lo es... me ha gustado mucho. De hecho, me he descargado ya de mi aplicación dos más que están disponibles para leerlos porque merecen la pena.

Es que el Dr. David Hunter es estupendo... Y eso marca mucho. Cuando el prota no te cae bien... malo, malo. Que quede claro que es antropólogo forense pero lleva un tiempo retirado y se dedica a la atención primaria. Pero le van a buscar para un caso especial... y no puede decir que no...

En esta novela conocemos a otro personaje que me ha gustado un montón, el inspector Bob Lundy: "Debía tener cincuenta y pocos años y tenía el físico de un boxeador envejecido que había empezado a engordar". Me parece, cuanto menos, entrañable. Y es encantador...

Además, hay una reflexión muy cierta referente al inspector: "Hay personas, como Lundy, a las que conoces y sientes que las conoces de toda la vida. Hay otras, en cambio, con las que te cruzas y no dejan en ti ninguna impronta". Yo creo que eso nos ha pasado a todos: esa persona a la que conoces y te sientes como si estuvieras en casa... y gente con la que pasas años y si dejas de verles no te preocupa lo más mínimo...

Lo cierto es que no se puede contar mucho de la trama sin desvelar cosas pero nos vamos a encontrar con personajes muy, pero que muy interesantes, como Andrew Task, viudo con dos hijos, Jamie y Fay, que vive con su cuñada Rachel Derby que, a su vez es la hermana de Emma, una mujer que desapareció hace años.

Y conocemos a Stephen Villiers, el padre de Leo Villiers, de 31 años, cuyo cadáver nos vamos a encontrar también en la novela... Y no podemos olvidar a Edgar Holloway, el misterioso hombre de la carretera... ¿qué? ¿no apetece leerlo a ver cómo encaja todo esto?

Bueno, me ha encantado el pueblo de Cruckhaven... Cuando se llega hay un cartel que dice "Bienvenidos a Cruckhaven" y debajo habían escrito: "Y ahora iros a la mierda"... ¡Olé con la hospitalidad!

En la novela conocemos bien a Rachel... Y me ha encantado porque estaba con un tal Mark Chapel, que la dejó por una estudiante a la que le quedaba mejor el bikini. En fin, lo que me ha gustado es la opinión que tiene de la chica: "He visto calamares con más principios que ella". Yo me imagino al calamar y me entra la risa, no lo puedo evitar...

Voy a cerrar ya... esta vez sin reflexión porque la que más me ha marcado es la que ya he incluido en la reseña. Pero no puedo dejar de recomendar la novela... hay que leerla.

martes, 22 de octubre de 2019

El año de los delfines (Sarah Lark)

Esto va a ser muy rápido... No me ha gustado nada. Lo compré en el Círculo de Lectores porque había visto que era de los más leídos y me equivoqué.

Podría cerrar ya pero me da un poco de vergüenza...

Nos vamos a encontrar con Laura, de 31 años y su marido Tobías, que viven en Colonia. Tienen dos hijos, Katharine, de 13 años y Jonas, de 9. La obsesión de Laura siempre han sido los mamíferos marinos y opta por "un empleo de guía en un barco donde se hacen excursiones con avistamientos de ballenas" Eso estaría genial si no fuera porque es en Nueva Zelanda... que le pilla un pelín a contrapié... (vamos, digo yo...)

Y allá que se va, en contra de todos. No me parece mal, para nada, que no se me malinterprete, por favor... pero es todo tan raro... Su comportamiento, sus relaciones allí, su relación con sus hijos y su marido.

Y, cómo no, tienen que aparecer los grupos ecologistas exagerados que luchan contra lo que hace la empresa para la que trabaja Laura. Por supuesto, el hijo del dueño es el cabecilla de estos grupos y, por supuesto, es guapo, majete, maravilloso... todo taaaaaan predecible.

En fin, que no me ha gustado, me he aburrido y no me ha enganchado nada de nada. Por no tener, no tengo ni reflexión final...

Tú no matarás (Julia Navarro)

¡Qué alegría tan enorme! Después de dos fiascos, me acabo de encontrar con una maravilla... No es que no me lo esperara, claro, porque Julia Navarro es un seguro de vida, pero cuando te zambulles en la novela descubres que lo tiene todo.

Y eso que a mí me cansa enormemente el tema de la Guerra Civil y la posguerra. No quiero que suene superficial o prepotente por mi parte, pero de verdad que la temática me resulta ya muy difícil.

Pero esto es otro nivel. Es una novela increíble. Comienza en 1941 (el año en que nació mi mami...) en un barrio en Madrid, presentándonos a los vecinos, unos del bando ganador y otros del bando perdedor. Conocemos a Fernando Garzo, de 25 años, a su madre Isabel y a su padre, D. Lorenzo, que está preso. También conocemos a Catalina, amiga de Fernando de toda la vida y por la que este siente algo muy especial. Sus padres, Asunción y Ernesto Vilamar están de parte de los vencedores, aunque la madre no cree que por ser del bando contrario, nadie vaya a ser peor... "En las calles había dos tipos de personas: los vencedores y los supervivientes"

El tercer gran amigo es Eulogio, de 28 años, que vive con Piedad, su madre. Es el gran amigo de Fernando desde siempre. Al comenzar nuestra historia, acoge en su casa a Marvin, un poeta americano un poco peculiar, la verdad.

Desagradable a más no poder es Antoñito, el hijo de D. Antonio Sánchez, el estraperlista. La mujer y las hernanas me recuerdan a la madrastra de Blancanieve y a las hermanastras, no sé por qué...

D. Lorenzo es uno de los personajes más agradables y más sensatos de la novela. Catalina le recuerda diciendo: "Si no leéis, no entenderéis la vida ni sabréis quiénes sois". Y, lo más importante, es el que da título a la novela. Fernando quiso ir al frente pero su padre no le dejó: "No matarás, hijo, tú no matarás". Porque él sabía de qué hablaba: "Cuando matas no sientes nada, el infierno viene después"

No se puede contar en realidad todo lo que pasa porque se desarrolla en un período de tiempo muy amplio... Van a aparecer personajes estupendos como el capitán Pereira o Ylena Kokkalis en Alejandría... Porque nuestros personajes van a tener una vida muy interesante, sin que ellos pudieran intuirlo. ¡Vaya aventuras! Eso sí, siempre juntos, con Adela, la hija de Catalina que nace en circunstancias especialísimas...

Otro personaje que me gusta mucho, aunque aparece poco es el Dr. Juan Segovia, que atiende a Catalina en su embarazo. Hablando con Asunción le cuenta lo que más miedo le daba cuando estaba luchando en la guerra: "... la posibilidad de enfrentarme a mi hermano. Él combatía a favor de la república, yo con los nacionales, y no sabía dónde estaba"

Y D. Victor, el jefe de Fernando en la editorial: "Sí, un bando ha vencido a otro, pero ¿ahora qué? ¿Sabremos volver a mirarnos los unos a los otros sin odio ni rencor? ¿Seremos capaces de superar lo que hemos hecho?". Yo le habría dicho a D. Víctor que sí, que ya estaba todo superado, que la generación de mis hijos ve la Guerra Civil como un hecho contemporáneo a las pinturas de Altamira... Pero me preocupa que los políticos que nos han tocado en suerte (o en desgracia) estén haciendo revivir los peores sentimientos de la posguerra (y de la guerra). Me encantaría saber qué sacan ellos de todo esto.

Hay una frase de Catalina, ya avanzada la novela que me ha hecho pensar, porque estoy en su línea la 100%: "La guerra la ganaría Franco, pero la perdimos todos. (...) Los muertos duelen por igual (...) Tus muertos y los míos valen lo mismo". Yo lo veo tan claro que me parece increíble que aún haya gente que no lo entienda.

Ufffff, ¡hay tantas cosas interesantes en el libro! Hay un personaje curioso, Benjamin Wilson, que cae bien unas veces y otras parece mala persona... Pero dice cosas interesantes y una de ellas me parece que deberíamos tenerla todos en la cabecera de la cama: "Por eso le estoy aconsejando que antes de hablar evalúe lo que le están diciendo y, en caso de duda, guarde silencio". Cuánto ganaríamos si todos hiciéramos caso de este consejito.

No he hablado de Farida, que es otro personaje muy particular, con un pasado abrumador y un espíritu indómito y luchador. Y su filosofía de vida es muy interesante: "La muerte es una condena que no merecemos pero que todos sabemos inevitable, por tanto es una batalla que nunca vamos ganar. Podemos salir airosos de alguna escaramuza, pero el resultado de la contienda está escrito de antemano". Muy cierto, pero duro de asumir.

Ya cierro, ya... Sé que no he contado nada de lo que pasa pero es muy sorprendente y no quiero contarlo. Pero el libro hay que leerlo. Se lee rapidísimo, hace reír, hace pensar, y está escrito maravillosamente bien.

Cierro con un pensamiento que creo que es una gran verdad: "...no solo es necesario hacer las cosas bien.hace falta suerte"

¿Hacia dónde se dirigen los coches en la noche? (Alfonso Aldin)

También es mala suerte: salgo de un libro que no me convence (y me da mucha pena porque la autora me suele gustar mucho) y entro en otro que me ha gustado incluso menos...

Este se me ha hecho muy largo y muy pesado y no he conseguido enterarme de mucho: me he perdido con la trama y no he llegado a saber qué quería transmitirnos el autor.

Nuestros protas principales son dos policías del Departamento de Investigación Criminal de Baton Rouge (Louisiana). Son Charles Dewey y Damien Waters, mucho más novato este último. Damien es un hombre curioso, y su pasado le va a perseguir durante toda la novela. "Nunca se dio cuenta de cuándo comenzó a volverse un obsesivo del orden, y ese es el problema de la mayoría de los trastornos: no darse cuenta a tiempo". Es una de las cosas que me hace pensar: cómo darse cuenta de que alguien (o uno mismo) sufre un trastorno, sea el que sea... cuándo se traspasa la fina línea que separa ser "rarito" de estar enfermo...

Como no he sido capaz de centrarme mucho en el libro, me cuesta entresacar cosas especiales, pero sí hay algo que me ha llamado la atención y me ha hecho sonreír un poquillo: "No creo que sean felices. Los hijos de puta tienen problemas para sentir alguna emoción, y eso les obliga a buscar emociones fuertes, aunque sea a costa de otros. Supongo que la vida longeva es más un castigo que una bendición para los hijos de puta".

Por otra parte, a Damien le apasiona la lectura y uno de los libros de los que habla y que le ha marcado es El gran Gastby. Yo creo que lo leí hace años y supongo que debía de ser muy jovencita porque no me marcó especialmente (tendré que volver a leerlo a ver qué me parece ahora). Así que voy a cerrar con una frase de este libro que creo que sí nos debe de hacer reflexionar un poquito.

"Cada vez que te sientas inclinado a criticar a alguien, ten presente que no todo el mundo ha tenido tus ventajas"

Una jaula de oro. La venganza de una mujer es bella y brutal (Camila Läckberg)

En general, soy muy aficionada a las novelas de Camila Läckberg. Pero esta, no sé, no es que me haya disgustado del todo, pero tampoco puedo decir que me haya gustado mucho...

Y, desde luego, no puedo estar de acuerdo con una de las críticas que aparecen en el propio libro: "Una novela de suspense psicológico, sexy y con un protagonista fascinante y ambigua".

Quizá es porque no he conseguido que la protagonista me guste del todo. No creo que el fin justifique los medios (casi en ningún caso) y hace algunas cosas que me separan mucho de su forma de pensar y de ver la vida-

Partiendo de eso, es cierto que la muchacha, Faye, (o Matilda, que es su primer nombre) no lo ha tenido nada fácil: su padre en la cárcel por maltratar a la familia, el hermano, muerto (colgado de un cinturón en un armario cuando ella tenía 15 años), sin dinero... y luego se casa con un hombre que es un imbécil, con dinero, sí, pero imbécil.

Y, cuando empieza el libro, leemos: "... tu exmarido ha matado a vuestra hija"... La cosa no mejora en absoluto.

Y ella es una chica lista... yo creo que no supo elegir a la gente, por miedo a que la dejaran sola de nuevo... o algo así, que yo de psicología entiendo lo justito (o un poco menos...). De hecho, su amiga Chris Nydahl, que sí me cae muy bien, lo dice en un momento de la novela: "Tú eres una de las personas más inteligentes que he conocido en mi vida y eso que conmigo me relaciono todos los días".

Pero no he conseguido empatizar con ella, ni con su forma de actuar y enfrentarse a las situaciones, así que, he leído la novela pero no me ha aportado demasiado.

Sí que voy a dejar una reflexión que nos debería hacer perder unos minutillos algunas veces: "Las mujeres son receptivas, quitan hierro, llevan la responsabilidad de todas las relaciones, se tragan el orgullo y se destruyen hasta casi extinguirse."

sábado, 12 de octubre de 2019

Cómo no ser una drama mamá (Amaya Ascunce)

Voy muy mal, pero voy... No me da tiempo a nada, así que llevo muchísimo retraso con las reseñas, pero avanzamos poco a poco...

Este libro lo he elegido porque mi amiga Estel me recomendó a la autora. Ella la había escuchado en la radio y descubrí que tenía un blog que había sido el que había generado el libro.

Me lo he pasado muy bien, la verdad. Ella ha ido escribiendo reseñas de las cositas que tienen las drama mamás (o de las mamás, simplemente) y además, incluye comentario de las personas que lo leen. Y es cierto que una se siente muy identificada... y no solo como hija, también como madre.

He de decir, que mi madre no es una drama mamá y yo creo que tampoco lo soy, pero hay muchas de las cosas que aparecen en el libro que han formado parte de mi infancia.

Una de las cosas que me ha hecho sonreír es eso de: "Dejad de pensar eso de 'Yo nunca seré como mi madre'". Hay que asumir que cuando seas madre, serás como la tuya, sí o sí... Y a tus hijos les dirás las cosas que siempre te prometiste que no les dirías. Y lo sé por experiencia personal: muchas veces me escucho y me entra la risa floja porque parece que estoy oyendo a mi madre. Por supuesto, la frase estrella es "Porque lo digo yo y punto". Que nadie piense que va a ponerse a razonar con adolescentes durante horas porque no va a ser así. Después de varias respuestas insoportables, sale a relucir la frasecita de marras y se acaba la tontería.

Otra cosa con la que me identifico plenamente: "Mi vida está llena de por-si-acasos. En mi bolso suelo llevar unos cinco o seis". Mi bolso es así, llevo agua oxigenada, unos guantes de látex, un mechero (jamás he fumado),... Eso sí, hace poco me pidió una compañera un metro y de eso no tenía... un disgusto muy grande.

Hay varias cosas que han marcado una generación: la frase "Tómate el zumo que se le van las vitaminas" que yo veo un vaso más de 1 minuto y me dan sudores; y eso de "hay que guardar dos horas de digestión antes de meterse en el agua", que nos hacía levantarnos tempranísimo para poder meternos en el agua en cuanto llegábamos a la playa.

La autora reconoce, como yo, que las madres tienen un lenguaje especial que solo entendemos los hijos: "Trae aquello que está allí, al lado de lo otro" y tú vas... y se lo das. Lo he dicho toda la vida, eso solo lo consigue una madre.

Si mi hermana leyera el libro, seguro que echaría unas risas con el capítulo de la crema Andina... ¡qué recuerdos!

Uy, me ha hecho mucha ilusión leer que en su segundo campamento, con 10 años, tenía el número 112... Yo tuve ese número en mi primer campamento, con 8 años, en Miraflores. Toda la ropa llevaba el dichoso numerito... ¡qué recuerdos!

Un buen consejo: "Jamás hay que hacer caso a una madre cuando te dice 'Haz lo que quieras'"... Y eso de "...te cuento hasta 3... que todavía no hay un niño vivo que haya oído decir a su madre 'tres'"

Cierro ya. De verdad que es muy agradable de leer, yo lo he pasado muy bien y cierro con un pensamiento de la autora que me parece muy recomendable :"No hay nada en la vida de lo que no te debas reír, ni siquiera de tu madre".

sábado, 28 de septiembre de 2019

Ojos de agua (Domingo Villar)

Cuando me regalaron y leí El último barco, puesto que ya había leído La playa de los ahogados, estaba claro que tenía que ir al origen, a la primera novela de Leo Caldas. Sí, ya le conozco, claro, pero quería conocerle desde el inicio. Y eso hice, buscar este libro y, sencillamente, disfrutarlo.

Nos vamos a encontrar con el cadáver de Luis Reigosa, músico profesional, saxofonista de jazz... Por él pone el autor el título a la novela: "Tenía los ojos de ese color, como si fueran de agua".

No quiero contar nada de la trama porque hay que leer la novela. Además, esta es más cortita. Parece que el autor quiere que empecemos despacito (porque la tercera es una señora novela...).

Pero sí que es el momento en el que conocemos a Rafael Estévez, el ayudante maño de Leo Caldas, que recala en Galicia como castigo a algo que había hecho en Zaragoza y que tiene un problema muy serio: "Algo en su interior rechazaba la incapacidad singular de los gallegos para llamar a las cosas por su nombre".

También conocemos a Clara Barcia, la científica, al agente Ferro y a Gustavo Barrio, el forense, con frases tan interesantes como: "Si la gente conociera el perfil psicológico de algunos de mis colegas, iría a curarse directamente a la carnicería".

Pero, sobre todo, conocemos al padre de nuestro inspector favorito... ¡qué maravilla de hombre! Me encantan los ratitos en los que va apareciendo: "A un hombre se le puede conocer por lo que bebe y por lo que lee"

A mí me encantan las reflexiones que van apareciendo en los libros que voy leyendo. Creo que ya he dicho alguna vez que he coleccionado citas célebres desde hace muchos años. Ahora, con eso que que todo está "en la red", ya no voy apuntando (y lo echo de menos). Y aquí hay una frase de sabiduría popular que me ha encantado: "Si parece un pato, camina como un pato y hace cua-cua es porque es un pato". ¡Ahí queda eso!

Pero sí que voy cerrar con una reflexión del padre del inspector, no sin antes recomendar de nuevo la novela, que es estupenda, se lee de maravilla y de disfruta desde el principio hasta el final. "En el campo aún puedes ver pasar los días. En la ciudad, los días te ven pasar a ti".

viernes, 27 de septiembre de 2019

Empiezo a recordarte (Noe Casado)

Pintaba muy bien, la verdad... El título estaba bien e incluso leí un poquito de qué iba... pero no cuajó. Tengo que decir que no me ha gustado. Vamos a ver, se deja leer pero no cubre las expectativas que yo tenía.

Parecía que iba a ser una novela más o menos histórica, ambientada en la época actual. Y... bueno... es más o menos eso pero la parte histórica cojea enormemente para priorizar el novelón rosa contemporáneo con protagonista masculino rico y guapo y protagonista femenina guapa, trabajadora, "lista" que termina a los pies del guaperas.

Poco más queda que decir: el prota es Pierce Wesley y la prota Séverine Chavannel. Se encuentran cuando Pierce se desplaza a Carcassone a supervisar las obras de un hotel de lujo situado en un edificio histórico.

Cosas del "destino", ellos ya habían tenido una historia previa mientas "estudiaban" en la universidad pero había terminado mal por determinadas circunstancias. Cuando se encuentran de nuevo, saltan chispas.

Lo mejor son los personajes secundarios: Pascal y Nestor, los colaboradores de Séverinne; Owen, el amigo íntimo de Pierce, Albertine Mercier, la amiga de Séverinne...

Por lo demás, la historia que se desarrolló en el antiguo palacio es la de Priscilla Bouchart pero está tan poco clara que da la impresión que está ahí solo para acompañar... y eso no me ha gustado nada.

Lo peor de todo es que esta reseña la cierro sin siquiera dejar aquí una reflexión final...

domingo, 22 de septiembre de 2019

El último barco (Domingo Villar)

Estoy muy enfadada conmigo misma... Cuando me regalaron este libro, que es una maravilla y me ha encantado, me di cuenta de que ya había leído otro de este autor... pero no encontraba la reseña. Además de reseñar en el blog, tengo una libretita con los libros que leo, indicando la fecha de inicio y la de fin... pues tampoco estaba. Me puse a buscar en el libro electrónico y me encontré con que sí, efectivamente había leído La playa de los ahogados y, por alguna razón, se me ha escapado. Ya lo volveré a leer... porque sé que me gustó mucho.

Ya está, ya me he desahogado... Ahora vamos al lío...

No se puede dejar de leer esta novela. Es larga, sí, pero se hace cortísima. Es de estos libros que quieres que se acaben para ver qué pasa, pero no quieres que se acaben nunca porque lo estás disfrutando muchísimo.

Los personajes son maravillosos. Nuestro prota, el inspector Leo Caldas es un encanto. Acaba de salir de una relación y anda un poquillo descolocado pero es sensato, sereno, tranquiliza mucho... Y está su padre que es lo mejor de lo mejor... ¡qué personaje tan encantador! Lo mejor es que tiene un libro que va completando poco a poco, el "libro de los idiotas" en el que va apuntando los idiotas que conoce. A mí, de verdad, me ha dado una idea...

El ayudante del inspector es también fantástico, Rafael Estévez. Es un maño que ha terminado en Vigo por cuestiones disciplinarias y no termina de encajar. Y eso sí, tiene un superpoder: los perros le odian. Es increíble... perro que le huele, se vuelve loco... ¡me encanta!

En este caso, Mónica Andrade, hija del Dr, Víctor Andrade, desaparece. Su padre, hombre de gran prestigio, cree que tiene más derecho que nadie a que su caso se lleve un poco como él quiere... Y Leo Caldas va poco a poco viendo qué situación tenía la chica y qué puede haber pasado.

Nos lleva a conocer a sus vecinos, a sus compañeros en la escuela en la que era profesora de cerámica y, lo mejor, conoceremos a Napoleón y a Timur. ¿Qué quiénes son? Napoleón es un mendigo y Timur es su perro. Según Walter Cope, amigo inglés de Mónica: "Ese Napoleón es la prueba de que sabiduría y riqueza navegan mares distintos". Para mí, Napoleón es la sorpresa de la novela y solo por este personaje merecería la pena leerlo. Sus frases en latín son sentencias maravillosas (sobre todo para mí, que no sé latín y me encantaría saber). Por ejemplo: "Amicus certus re incerta cernitur" (Los amigos buenos dan la cara en los momentos malos).

Vamos a conocer, en un momento dado al inspector Vasconcelos, portugués y encantador que, además, "A cada lado del cuello colgaba la mitad de unas gafas que se unían con un imán sobre los ojos" ¡Cómo me gustan a mí esas gafas! Las vi por primera vez en C.S.I. Miami donde las llevaba el forense... Algún día tendré unas...

Uy, otra cosa que me ha encantado... Leo Caldas está viendo con Elvira la película Tora! Tora! Tora! y le dice que es una película que no ha visto casi nadie... ¡Yo la he visto! ¡Sí, yo! Y no me gusta el cine y no he visto casi ninguna peli... ¡qué cosas!

No me quiero extender pero hay que leerlo, sí o sí. De verdad que lo he disfrutado desde el primer párrafo hasta el último.

Cierro con una frase del padre del inspector, el personaje más entrañable: "Puedo convivir con el miedo a morirme, pero no quiero tener también miedo a vivir"

sábado, 21 de septiembre de 2019

Fariña (Nacho Carretero)

He tenido este libro entre los "a leer" mucho tiempo pero no me llegaba a decidir. Tanta polémica, tanta pseudo prohibición... me echaba para atrás. Y, al final, estando en la playa, me decidí y lo he leído.

Y he de decir que me ha gustado. Es muy interesante y, por supuesto, muy inquietante.

Se da uno cuenta de lo que supone el dinero, sobre todo si se consigue de forma sencilla... Pero sobre todo, está claro por qué no se va a erradicar nunca el tráfico de droga... demasiado en juego para demasiada gente.

Todo empezó con el tabaco, claro. Me hizo gracia que se llamaba "Winston de batea": "En ocasiones el tabaco se escondía bajo el mar, en el reverso de las bateas, esas plataformas que cubren la ría de Arousa y que sirven para criar mejillones. De esa práctica nació el término Winston de batea".

También me ha gustado la cita de Dwight D. Eisenhower cuando liberaron Auschwitz: "Graben todo. En algún momento, algún bastardo se levantará y dirá que esto nunca sucedió"

Me ha llamado la atención enterarme de que el contrabando no fue delito hasta 1982... Por eso no pasaba nada. De hecho no solo no estaba mal visto sino que era casi honorable dedicarse al contrabando... Parece increíble. Pero, claro: "era una industria al margen de la legalidad. En consecuencia se creó, se alimentó y se consolidó una cultura delictiva"

El contrabando estaba tan interiorizado en la sociedad que el autor nos cuenta que en la situación encajaba perfectamente la cita de Mark Twain: "Una vez mandé a una docena de amigos un telegrama: Huye de la ciudad inmediatamente. Se ha descubierto todo. Y todos huyeron". Hay que reconocer que la cita es ingeniosa pero si ahondamos un poquito, da mucha pena.

Otra cosa que queda clara es que, en este mundo del narco, en algún momento, antes o después, siempre va a salir algo mal... Y según nos cuentan, en ese momento, unos van a la cárcel y otros desaparecen...

Eso sí, al parecer, los narcos gallegos son los mejores del mundo y por eso a los cárteles colombianos les gusta trabajar con ellos... ¡qué honor!

El libro hace un repaso por todas las operaciones policiales, por todos los momentos por los que ha pasado el contrabando de tabaco y droga y cómo ha afectado a la sociedad, sobre todo a la gallega, pero por extensión, al resto de España.

Merece la pena leerlo, de verdad, está muy bien escrito y se aprenden muchas cosas. Pero no creo que sea para levantar la polémica que ha levantado (sin quitarle ningún mérito, de verdad, que me ha gustado mucho)

Y cierro con la reflexión de un policía, que es lo mismo que me he planteado yo mientras estaba leyendo: "Yo me pregunto si les merece la pena una vida de tanto estrés y precauciones a cambio de ser millonarios... La respuesta es la de siempre: les pierde la ambición; los capos gallegos no saben dejarlo"

sábado, 31 de agosto de 2019

La Biblia perdida (Igor Bergler)

Como siempre, llega el verano y leo mucho pero escribo poco... ¡cosas que pasan!

Elegí este porque pensé que sería una especie de thriller eclesiástico, que me gustan un montón. No es exactamente eso, pero prometía mucho.

Y, ¿qué me ha parecido? Tengo sentimientos encontrados.... la trama me ha parecido demasiado enrevesada y con un final un poco "cogido por lo pelos". Pero, el resto, es espectacular... unas lecciones de historia increíbles, con unas anécdotas muy divertidas y muy interesantes. He aprendido muchísimo aunque la trama en sí no me ha parecido espectacular.

Los personajes son muy interesantes, la verdad, pero se podría haber sacado un poquillo más de ellos.

Para ponernos en situación, Charles Baker, el prota es "una especie de Sherlock Holmes de la cultura", además es el mayor experto en vampiros y en crear leyendas y en hacer funcionar la propaganda (que me ha llamado mucho la atención). Había sido "...jefe de las campañas electorales de seis senadores y un presidente de Estados Unidos (las había ganado todas)".

Nuestro prota se traslada a Sighisoara en Transilvania para dar unas conferencias, como excusa para tratar de encontrar una espada y, si es posible, a su abuelo, que había desaparecido mientras la buscaba. Durante la conferencia, le va a buscar la policía porque están apareciendo cadáveres con su tarjeta de visita encima... Ya ahí empieza todo.

Como decía antes, la trama ne ha dejado un poco fría porque esperaba mucho, pero he aprendido muchas cosas.

Nos da una buena lección sobre Vlad Tepes y las cosas que tenía, la criatura. Al parecer, era un hombre muy culto pero luego metió a los mendigos, ladrones, inválidos en un granero y los quemó vivos, con el pretexto de que les iba a dar de comer... ¡ahí estamos! Y, vaya... le llamaban "el empalador!, ahí lo dejo... Pero es una personaje que no deja de llamarme muchísimo la atención.

Al hablar de Vlad Tepes, habla, por supuesto, de los vampiros. Ya sabemos que las cosas que más "les gustan" son la cruz, la estaca, el espejo y el ajo. Yo sé que no pueden entrar en una casa si no son invitados, pero no sabía que no podían salir de la tumba si encima hay un rosal plantado. ¡Bueno es saberlo!

Tengo que contar de dónde viene la expresión "sentado en el trono": "Los reyes tenían un trono especial con un agujero, bajo el cual había una bandeja que encajaba en una especie de cajón. Hacían sus necesidades allí, y se levantaban solo para que los limpiasen los sirvientes a la vista de todos. Después paseaban la bandeja, todavía humeante, bajo las nobles narices de los condes, de los marqueses y de las damas que los acompañaban". Una tradición muy bonita...

Hay otra cosa que me ha llamado la atención: "La falta de soledad es el enemigo más temido del pensamiento libre". No lo había pensado nunca así, pero es cierto que, si siempre estamos rodeados de gente, poco podemos pensar por nosotros mismos. Y las redes sociales son una forma muy clara de estar siempre "rodeados". Da un poco de miedito, la verdad.

Podría seguir contando cosas que me han llamado la atención, como la reflexión sobre el bien y el mal: "Somos conscientes de las cosas buenas del mundo y de la vida solo porque tenemos el mal con el que compararlas".

Sin embargo, no creo que sea un libro para recomendar. Es muy largo y se hace un poco largo, las dos cosas.

Sí que quiero dejar una reflexión final, como siempre: "Perseverar es diabólico si te empecinas en una tontería"

Otro personaje histórico increíble es el emperador Rodolfo. Un hombre fascinante, él y su gabinete de cositas increíbles. Bueno, tenía migajas de la arcilla con la que Dios moldeó a Adán, ¡no digo más!. Además, tenía un león y Tycho Brahe le había dicho que era como su alma gemela. Un día el león, la criatura, se murió y el emperador se negó a comer, beber o tomar medicación y... se murió a los 3 días.

lunes, 5 de agosto de 2019

La leyenda de la mariposa azul (Calista Sweet)

Este sí que me ha gustado... Lo he pasado muy bien, ha sido muy relajado y muy agradable de leer.

El libro empieza con una frase muy interesante: "Intenta no ser una persona de éxito, sino alguien de valor" (Shakespeare)

Vamos a conocer a Dana, locutora de radio de éxito en Madrid, a la que mandan a Sevilla a tratar de localizar a Franco Noble, el autor del libro del momento, Hablar con las manos. Dana no es muy dada a empatizar ni a adaptarse a nuevas situaciones: "... no se mostraba muy predispuesta a variar una opinión que le había costado años alimentar".

Además de conocer Sevilla, le toca leerse el libro, lo que le parece una pérdida de tiempo... Pero allí el autor se pone en contacto con ella y comienza una amistad interesada e interesante...

Ella descubre que Franco es un hombre de treinta y pocos años, que era profesional de éxito y que, de repente, tras una situación límite, pierde a su novia, a muchos de sus amigos, y cambia de actividad.

Nos vamos a encontrar con personajes estupendos: Pepa, amiga de Dana, canaria y encantadora; la tía Ani, tía de Franco (Manuel), que es también maravillosa y muy sabia; el propio Franco...

Poco a poco, vamos viendo capítulos del libro que, vaya, es muy curioso y podría gustarme. Habla de la teoría de la piel: "(...) un nuevo método basado en la importancia del silencio y en la comunicación ajena al tradicional sistema de transferencia de información mediante el canal auditivo".

En uno de los capítulos del "libro en el libro", ponen un ejercicio "como deberes" al final, que me ha parecido que quizá todos deberíamos hacer. Se trata de escribir: "Soy una persona normal, con sus virtudes y sus defectos. Me acepto y me gusta lo que soy". No soy nada amiga de los libros de autoayuda pero hay que reconocer que si somos capaces de escribir esto y creerlo de verdad... las cosas nos pueden ir mucho mejor.

Otra cosa que me ha gustado es que "un abrazo es como un traje a medida: siempre sienta bien". Lo primero en lo que he pensado es en Joan y sus "abrazos gratis"... Y no he podido evitar sonreír. Le vamos a echar mucho de menos ahora que se nos ha ido a muchos kilómetros de aquí... Pero seguirá dando abrazos gratis en Togo, seguro.

¡Ah! y he aprendido lo que significa la mariposa azul, que no había oído nunca: "... cuando alguien se topa con una mariposa azul, portadora de buenas noticias, significa que su suerte cambiara o que sus deseos están a punto de cumplirse".

Una novela muy agradable y muy recomendable. Yo no conocía a la autora, que se llama en realidad Rosario Naranjo, pero es posible que busque algún otro libro suyo. Es una novela romántica pero tiene un hilo muy interesante.

No me quiero alargar mucho más, así que voy a cerrar con otra frase de Shakespeare, con la que me identifico plenamente: "Es más fácil obtener lo que se desea con una sonrisa que con la punta de la espada".

Desaparición en la roca del diablo (Paul Tremblay)

El título sonaba muy bien, así que decidí leerlo... Me equivoqué

No me ha gustado, la verdad... Es tremendamente lento al principio, no se sabe muy bien dónde quiere ir a parar el autor y luego, al final, va todo tan rápido y es tan poco coherente que te descoloca... O eso es lo que me ha pasado a mí.

En definitiva, se trata de la desaparición de un chaval de 13 años que no vuelve a casa una noche de verano en la que ha salido con sus amigos. Nuestro prota es Tommy y sus amigos, Josh y Luis.

Para mí, el mejor personaje es Janice, la abuela... Por supuesto, muy importante Elisabeth, la madre y Kate, la hermana de 11 años. Son ellas las que tienen que ir luchando y enfrentándose a una situación cada vez más límite.

Poco más se puede contar porque, como no me ha gustado, no voy a dar más explicaciones. Eso sí, casi siempre se puede sacar algo en claro y aquí también hay una frase que me ha gustado mucho

"...cuando rebatir lo posible es imposible, lo imposible se convierte en verdad"

domingo, 4 de agosto de 2019

Sakura (Matilde Asensi)

Otra "obligación"... cuando Matilde Asensi saca nuevo libro, allá voy yo a comprarlo... Y esta vez he esperado a la Feria del Libro porque me gusta comparlos allí.

En esta novela vamos a conocer un poco más a Vincent van Gogh... Y cuando te gusta, como a mí, lo disfrutas mucho más.

En 1991 pasé 3 meses trabajando en París. Mejoré mi francés, aprendí cómo se trabaja en el departamento de exportación de una multinacional y descubrí que París es una ciudad sobrevalorada. Pero,... conocí a gente estupenda, entre ellas, mis compañeras de despacho. Y una de ellas me llevó una tarde a Auvers sur Oise... Creo que fue lo que más me gustó de mi estancia allí. Lo disfruté muchísimo y de ahí que Van Gogh me guste especialement

Lo primero, para situarnos, Sakura es cerezo en flor.

El japonés Ichiro Koga congrega a un grupo de personas para que le ayuden a localizar el cuadro Retrato del Dr. Gachet de Van Gogh, que ha desaparecido en 1996.

El grupo lo componen: Odette Blandeau (Marsella), John Morris (Warren - Michigan), Oliver Roos (Liverpool), Gabriella Amato (Milán) y Hubert Kools (Amsterdam), que será nuestro narrador.

Cada uno se dedica a una cosa y entre todos van a tener que ir superando pruebas hasta lograr su objetivo. Para ello tendrán que tener presente otro cuadro de van Gogh, Retrato de Père Tanguy.

He aprendido muchísimas cosas de van Gogh y de su pintura. De momento: "Van Gogh era un arrogante intratable, un mezquino egoísta al que nadie soportaba, un tipo violento e inmaduro a quien los oportunos recortes en la correspondencia que sostuvo con su hermano Theo y que realizó su cuñada, Jo banher, y el perfil lacrimógeno de artista desgraciado, pobre y loco creado por él y alimentado durante un siglo por su familia, habían convertido en un santo bondadoso y dulce".

También he aprendido que tenía influencia del Ukiyo-e japonés... Nunca me había dado cuenta (tampoco soy una experta) pero en el cuadro Retrato de Pére Tanguy hay una serie de cuadritos de influencia japonesa que son con los que van a trabajar nuestros protas.

Y se aprende mucho sobre el color... Entre otras cosas, algo que ya sabía, pero que en lo que no había reparado: "Mezclar colores reales, es decir, añadirles o sumarles tonos, siempre da como resultado el color negro, mientras que la suma de colores de luz siempre da como resultado el blanco"

¡Ah! Me he llevado una alegría enorme cuando ha aparecido el cuadro La habitación de Arlès (1888). Le tengo muchísimo cariño... es igual, igual que la habitación que yo tenía en el colegio mayor en el que estuve alojada en París...

No se puede contar nada porque todo se va complicando poco a poco hasta llegar a un final bastante curioso y hay que descubrirlo leyéndolo, por supuesto. Merece muchísimo la pena, de verdad.

Voy a cerrar una con una reflexión de nuestro narrador, que nos puede dar que pensar: "Si el arte visual debía representar el mundo, la vida y las costumbres de cada época, yo me debatía en la duda de si los artistas actuales solo veían lo peor de la nuestra o en que la nuestra era exactamente como ellos la representaban en cuyo caso resultaba bastante deprimente, cosa que me negaba a admitir."

Largo pétalo de mar (Isabel Allende)

Otro de los libros que tuve que comprar en la Feria del Libro...

Isabel Allende me encanta, siempre me ha gustado muchísimo. Pero siempre que leo algo suyo me deprimo una barbaridad: la ilusión de mi vida es escribir un libro y, después de leer cualquier cosa de esta autora, me doy cuenta que nunca podré hacerlo...

Lo primero es decir que el título es el nombre que le dio Neruda a Chile... Neruda, mi poeta favorito, que aparece bastante en este libro, lo que le da un atractivo adicional, claro.

Es una historia estupenda, la historia de Víctor Dalmau y Roser Bruguera, que salen de España exiliados tras la Guerra Civil. Se asientan con mucho esfuerzo en Chile y entonces aparece Pinochet... y tienen que volver a salir de su hogar, con todos los problemas que eso supone.

Se marchan a Venezuela, donde: "Cualquier disculpa era buena para celebrar con música, baile y alcohol, el dinero parecía correr a raudales, la corrupción alcanzaba para todos". Me ha llamado muchísimo la atención... ¡qué diferencia con la situación actual!

Este libro hay que leerlo: la historia es maravillosa, los personajes son increíbles y está escrito deliciosamente bien... ¿qué más se puede pedir?

Y hace pensar mucho... ¿por qué las diferencias de pensamiento pueden llegar a desencadenar una guerra? En política, en religión... ¿es necesario? ¿Tan primitivos y animales podemos llegar a ser? Está claro que sí, por supuesto, pero me da muchísima pena... Y me reafirma en mi convicción de que la mayoría lo que quiere es dominar a los demás: ningún político quiere trabajar por los ciudadanos. Todos pretender dominar y acoplarse en el puesto de poder: si puede ser pacíficamente, mejor y, si no, pues como sea... Lo importante es dominar y estar por encima de los demás.

Al principio de la novela, cuando conocemos a nuestros protagonistas, nos hablan de la "quinta del biberón"... ¡qué horror!: "la leva de niños reclutados cuando ya no quedaban hombres jóvenes ni viejos para la guerra". El hermano mayor de mi suegro (que es el pequeño de 6 hermanos y ya tiene 88 años) formó parte de esos chavales... Y murió enseguida... Y mi suegro cuenta que su madre nunca volvió a ser la misma, con lo que eso supuso para su familia. De las cosas que más le marcaron es que en su casa nunca se volvió a celebrar la Navidad... No volvió a tener una cena de Nochebuena hasta que ya era novio de mi suegra y fue a cenar con su familia...

Roser nos explica una cosa que, por sabida, no es menos interesante: "La ley natural del universo es la entropía, todo tiende al desorden, a romperse, a disiparse, la gente se pierde, miren cuántos se perdieron en la Retirada, los sentimientos se destiñen y el olvido se desliza en la vida como neblina". Es una manera maravillosa de contarlo... Yo soy más prosaica y lo veo demostrado día a día en la habitación de mis hijos.

Voy a cerrar con una frase maravillosa, una frase que destila todo el amor que un hombre puede sentir por una mujer, una autentica declaración: "Con ella había vivido todo lo que valía le pena vivirse"