domingo, 23 de junio de 2019

La sociedad literaria del pastel de piel de patata de Guernsey (Mary Ann Shaffer y Anni Barrows)

A mi compi Estel le regalaron este libro y, mientras lo estaba leyendo, me dijo que estaba segura de que me iba a gustar y que me lo iba a dejar en cuanto lo terminara. Y así fue: las dos cosas se han cumplido, ella me lo ha dejado y a mí me ha gustado. Y me ha gustado mucho.

Lo he pasado realmente bien leyéndolo... Es una novela epistolar, y hacía mucho que no leía ninguna. Ahora hay varias que son correos electrónicos, pero no es lo mismo. A mí siempre me ha gustado mucho escribir cartas, me encantaba. Ahora ya no se escriben, es una pena, pero la cartas permiten pensar mejor lo que se dice y decir cosas que a lo mejor uno no se atreve a decir en persona...

El libro es estupendo, agradabilísimo de leer, simpatiquísimo... Y trata temas un poco difíciles con una delicadeza extrema, siempre rodeado de un humor suave y tranquilo.

Nos situamos al final de la Segunda Guerra Mundial y conocemos a nuestra prota, Juliet Ashton, una muchacha de 32 años, escritora que ha escrito, con bastante éxito Izzy Bickerstaff se va a la guerra. En un momento dado, recibe una carta de un tal Dawsay Adams, que vive en Guernsey, una isla del Canal... Y ahí empieza todo...

Así conocemos La sociedad literaria del pastel de piel de patata de Guernsey... ¡qué maravilla! Hay que leer por qué se llama así... no lo puedo contar. Sí que se debe a Will Thisbee, uno de los miembros de la sociedad.

Nos enseñan cómo la literatura puede ayudar a cualquier, cómo los libros nos unen con mucha gente y cómo nos pueden liberar de muchas de nuestras ataduras. De hecho, en el libro nos lo cuentan: "Eso es lo que me encanta de la lectura: uno encuentra en un libro un detalle que le despierta interés, y ese detalle lo lleva a otro libro, y allí encuentra otro detalle que lo lleva a un tercer libro. Es una progresión geométrica: sin un final a la vista y sin otro motivo que no sea el simple goce".

Hay que leerlo... no puedo contar todo, pero es increíble cómo nos describe a los personajes de Guernsey a través de sus propios escritos y de lo que escriben de ellos son convecinos... terminamos conociéndoles estupendamente.

Otros personajes magníficos son el editor de Juliet, Sidney Stark y su hermana Sophie Strachan, muy amiga de nuestra prota.

Cuando Juliet se desplaza a Guernsey, se enamora de la isla, de la gente y de la historia de Elizabeth MacKenna... Una historia impresionante, que abarca un soldado alemán y un campo de concentración y que ha dejado en la isla a Kit McKenna, su hija, una niña encantadora que acumula mucho sobre sus hombros.

Y yo me he enamorado de la historia de la abuela de Isola Pribby y Oscar Wilde... Un Oscar Wilde que visitó la isla y dejó unas cartas firmadas OF.O'F. W.W. (Oscar Finagl O'Flahertie Wills Wilde)... ¡Con lo que a mí me habría gustado conocerle! Había un programa en la radio en el que preguntaban con quíén te gustaría compartir una cena para poder charlar. En mi caso serían muchísimos los elegidos pero creo que Oscar Wilde estaría entre los primeros.

No me quiero extender más... Además, me he enterado de que han hecho la peli. No puede ser tan buena como el libro porque en la peli no están las cartas.

Y dejo, para terminar, una pequeña reflexión que deberíamos tener todos en la pared de la habitación para leerla cada día al levantarnos: "El humor es la mejor manera de hacer soportable lo insoportable".

sábado, 15 de junio de 2019

La maestra de títeres (Carmen Posadas)

Siempre me ha gustado la forma de escribir de la autora, así que, cuando tuve la posibilidad de leer este libro, me pareció una buena idea. Y acerté, por supuesto que acerté.

Nos narra la autora la vida de "la Calanda", Beatriz Calanda. He de decir que, en un primer momento, pensé que era un personaje real y traté de averiguar quién era... hasta que me di cuenta de que no, que es un personaje de ficción, salido de la imaginación de la autora. Eso sí, dicen las malas lenguas que está basado en algún personaje real del mundo rosa... ¡ahí lo dejo!

Vamos a ir recorriendo su vida partiendo desde el momento actual, en el que está casada con Arturo Guerra, su cuarto marido, para ir descubriendo cómo ha ido llegando hasta esta situación. Conocemos a sus cuatro hijas, una de cada marido: Tiffany, Alma, Herminia y Gadea, con la teoría de Arturo Guerra "según la cual cada una de las hijas de su mujer acababa teniendo rasgos de carácter en común con el padrastro con el que se criaba"

Arturo Guerra es un personaje que me ha gustado mucho. Es un hombre de números... y nos deja un pensamiento que tengo que traer aquí: "... la vida, más que una ecuación, es una ruleta y, por tanto, un artilugio matemático y caprichoso a la vez. Uno de reglas tan simples que cualquiera puede jugar, pero en el que solo algunos afortunados aciertan plenos"

Lo que todo el mundo conocía de nuestra prota es que "Beatriz Calanda y Pérez Rapia porcedía de una acomodada familia madrileña pero residente durante años en Inglaterra donde su padre, Julián, trabajaba en un banco londinense". La realidad es un poco diferente, la verdad pero, como decía siempre a sus hijas: "La verdad no interesa a nadie". Y también decía "Así fue como aprendí que la verdad no existe, la verdad se fabrica y precisamente a eso me dedico desde aquel entonces; es tan divertido como útil". Esta reflexión merece que le demos una vuelta... ¡cuántas verdades se fabrican y nosotros las consideramos reales!

Vamos a conocer la sociedad española de la posguerra, que nos presentará la madre de Beatriz, Ina. Es otra persona con una vida muy peculiar, desde el momento en que es rescatada, siendo niña, del negocio en el que se dedicada a maquillar cadáveres. Lorenzo Pérez, conocido como Encho y su mujer, Perlita, la traerán a España y la criarán como una niña bien.

Un personaje maravilloso de la novela es Juan Pablo Yáñez de Hinojosa, el hombre que recibe a los Pérez cuando vuelven a España y que los ayuda a instalarse y adaptarse a su nueva vida. Termina siendo el secretario-consejero de Lorenzo y un gran amigo de la familia. En él vemos cómo va evolucionando el pensamiento de los españoles para mantenerse siempre a flote. Es francamente interesante.

Van a ir apareciendo en el libro Ramón Areces y Pepín Fernández, Francisco Ibáñez, ("... un muchacho con mucho talento, ahora no le conoce ni el Tato, pero dará que hablar, ya lo verás"), José Monge, ("Por el momento, pocos saben quién es José Monge, ese monstruo del cante al que llaman Camarón de la Isla, pero dale tiempo al tiempo") o Paco de Lucía ("Lo raro en Paco de Lucía no es su nombre, sino la forma tan poco ortodoxa que tiene de tocar la guitarra").

También nos damos cuenta del papel de la mujer en la sociedad... "Hay que ver - le decían a Santi sus amigos - lo bien que queda tu mujer la pongas donde la pongas". Y la cosa es que entonces eso era lo que se pensaba y ni siquiera a las mujeres les parecía mal... También nos cuenta el libro que hasta 1963 "según el Código Penal, un marido que sorprendiera a su legítima en flagrante adulterio y la matase para salvaguardar su honor, quedaba impune"

Es una novela muy entretenida, con personajes estupendos y con un poco de todo... para pasarlo realmente bien.

Cierro, como siempre, con un pensamiento que me ha resultado curioso: "Qué difícil es juzgar a nadie (...) A diferencia de las novelas en las que uno sabe enseguida quiénes son buenos o malos, en la vida te equivocas todo el tiempo"... Quizá por eso sea tan estupendo enfrascarse en una novela y olvidarse del mundo.

domingo, 2 de junio de 2019

El legado de los espías (John le Carré)

Esto era un sí o sí, claro. Novela nueva que veo de este autor... allá que voy...

Las novelas de espías me encantan pero es que los espías de John le Carré son especiales... Uno los ve y piensa, "jo, podría ser yo misma"... Son gente de lo más normal (en apariencia), como el vecino de al lado o el del puesto de periódicos...

En esta novela vuelve a aparecer nuestro amigo George Smiley pero un poco de refilón porque el verdadero prota es Peter Guillam, "antiguo miembro de la organización, felizmente retirado y residente desde hace tiempo en una zona rural de Francia".

A nuestro amigo Peter le reclaman de El Circo para revisar unas operaciones que se desarrollaron durante la Guerra Fría y que entonces se consideraron un éxito y que ahora se ponen en tela de juicio por parte de quienes casi ni saben lo que es la Guerra Fría...

Me llama la atención porque nos pasa mucho: queremos juzgar comportamientos de otra época con los valores de la nuestra y eso no es posible... Es como cuando se juzga el machismo en otras épocas (hace poco lo oí de la Edad Media...). Pues sí, claro, es que nos guste o no, en aquel momento, el concepto era diferente...

Pues eso les pasa en nuestra novela, que al pobre Peter le vuelven loco (o lo pretenden) con aquella operación. Menos mal que lleva "... toda una vida con licencia para mentir" y se desenvuelve de maravilla.

Hay otra cosa que me ha hecho pensar, que lo dice un médico, el Dr, Meadows: "El suicidio es una decisión que ciertas personas toman relativamente pronto en la vida. (...) Quizá no lo sepan pero lo llevan dentro. Un día ocurre algo que desencadena la reacción."¿Será así de verdad? ¿Habrá gente que esté predispuesta al suicidio, que se suicidará con seguridad en cuanto algo desencadene esa "reacción"? Es duro pensarlo...

En fin, que los libros de Le Carré hay que leerlos: es obligatorio... Así que, no se puede dejar pasar este tampoco. Porque no es solo la trama, es el lenguaje, exquisito, son los personajes... cómo consigue que te identifiques con unos o con otros, que sepas cómo van a reaccionar,... Es todo.

Y cierro, con una frase curiosa: "Cuando la verdad te alcance, no te hagas el héroe. Corre."

Palabras que caen como la lluvia (Caroline March)

Lo cierto es que el título sonaba de maravilla.. Y el libro está bien, se deja leer...

En realidad, cuando uno lo empieza a leer, promete más de lo que luego ofrece, porque luego se vuelve un poco previsible y pastel, pero está agradable y no me arrepiento de haberlo leído.

Vamos a conocer a Livia que está preparando una oposición para profesora de secundaria. Se va a la casa que tiene su familia en Suances, en la que ha pasado la mayoría de los veranos de su vida y se encuentra con la sorpresa de que su madre ha alquilado una de las habitaciones (bueno, LA habitación) a un tal Sergio...

Y a partir de ahí empieza todo.

Livia ha tenido un problema con su padre y se ha llevado una tremenda decepción con el divorcio de sus padres. No voy a contar por qué para no destripar nada, pero he de decir que el padre es estupendo, la verdad.

Fue él quien le hizo empezar a disfrutar de la lectura... Le presentó un libro de Harold Shelby (que, por cierto, no he conseguido encontrar, con lo que no sé si es real o ficticio...) con una cita muy interesante: "Hay pasiones que debemos olvidar para sobrevivir, al igual que hay palabras que caen como la lluvia y que una vez en el suelo solo son charcos próximos a extinguirse".

Además, su padre le propone buscar una canción para cada uno de los libros que lee. No sé si yo sería capaz de hacerlo, pero me parece interesante: "Encuéntrale una canción, todos los libros tienen una, todos los momentos en la vida también, porque ya todo está contado, solo tenemos que atrapar las palabras y ordenarlas para que conformen nuestra propia historia"

Hay que decir que, después de esto, la novela deja de ser seria... Vamos a conocer a Violeta, la vecina de Livia en Suances: es la bomba... casada, con 3 enanas... ¡increíble!

Y también nos vamos a enterar de que Livia era una surfista espectacular y había tenido una relación larga con su profesor, Asier, con quien se volverá a encontrar en Suances.

Otro personaje estupendo es Marta, su amiga del alma, que se ha ido a Escocia a trabajar. En un determinado momento, Livia irá también para allá... en fin, que hay que leerlo.

Sergio, por supuesto, es uno de los personajes principales: "...se asemejaba a un neohippy con pintas de no saber muy bien si decantarse por la moda hipster". A mí me ha caído muy bien, la verdad: es majete, simpático y a mí me parece que sabe lo que hace... Cuando se entera del nombre de nuestra prota, su reacción es: "¿Livia Roma? Ah, entiendo, que Poncio Pilatos ya estaba pillado". Menos mal que luego Livia nos explica la razón del nombre: "Es por Livio Andrónico, un esclavo que, una vez liberto llegó a ser el primer maestro de griego de Roma. Fue el fundador de la poesía épica".

Me ha llamado la atención lo que le decía a Livia (y a sus compañeros de clase, claro) un profesor de Derecho Penal: "Nunca os pongáis en el lugar del acusado ni de la víctima, nunca intentéis pensar qué habríais hecho vosotros en su lugar porque acabaréis perdiendo la razón. Limitaos a aplicar las leyes aunque muchas os resulten injustas. No sois legisladores, sois funcionarios". Entiendo que lleva mucha razón: no se puede empatizar con todas las víctimas ni con todos los acusados, pero suena tristísimo eso de "sois funcionarios"...

No me entretengo más, que me alargo como siempre... Es entretenido, la verdad, un poco previsible, pero entretenido... Y cierro con una frase que le dice Sergio a Livia en un momento en que no está muy bien: "Para volver a sonreír, primero hay que llorar todas las lágrimas que llevamos dentro"

sábado, 1 de junio de 2019

María Magdalena, la señora del Señor (José Ramón Arana Marcos)

He de confesar que no conocía al autor y he tenido que buscar en la red un poquito. Uffff... ¡qué barbaridad! Me encanta que autores tan preparados, que han escrito libros tan "sesudos" como los que he podido ver, sean capaces de escribir una novela como esta, que aporta mucho y llega a cualquier persona que la tenga en sus manos.

El título me llamó muchísimo la atención: María Magdalena ha tenido para mí siempre un atractivo muy especial, por muchas razones que no voy a contar aquí, que me entretendría mucho... (como casi siempre), "Hoy los historiadores se siguen preguntando qué fue de aquella mujer tan prodigiosa como eficaz y solo encuentran una palabra para designarla, para no confundirla con la madre de Jesús: María Magdalena"

La novela nos narra la vida pública de Jesús desde su relación con María Magdalena. Cuando ella le conoce surge inmediatamente un vínculo muy especial. "En cuanto lo vio hablar por primera vez sintió, porque esta mujer con su lucidez era de sensibilidad extrema, que aquel hombre era el hombre que el destino le había deparado". Ella se enamora perdidamente de Jesús pero se da cuenta que él no va a buscar ese tipo de relación con ella y se resigna a tener con él una relación de amistad. Una amistad profunda... Ella tiene una influencia importante sobre él y él le aporta a ella mucha serenidad. "Aquella mujer tenía la virtud de ir directa a su corazón u a sus necesidades; era como la voz que estaba esperando para que le despertara su mensaje"

Nos presenta a María como una mujer que sabe lo que está haciendo. Es prostituta porque es lo que la sociedad, de alguna forma, le ha obligado a hacer, Pero consigue ser dueña de su vida, lo que es tremendo para una mujer en aquel momento. Una mujer culta, que aprende mucho de los hombres con los que tiene relaciones (increíble...) y que se ha creado una reputación que, aun siendo prostituta, ha generado en torno a ella un aura de un cierto prestigio. "Y Jesús sabía que aquella mujer entregada a hombres desconocidos no buscaba el amor en la riqueza, ni riqueza en el amor"

Ya nos presenta a Jesús como alguien que se ha estado preparando en el desierto y se va dando cuenta de cuál es su misión. Hay una frase que me ha gustado mucho: "En el desierto había aprendido que los días se sucedían, que uno venía detrás del otro, que el sol siempre luce de la misma manera y que las nubes no pueden nada contra sus rayos poderosos". Me parece algo para recordar cuando las cosas se van poniendo complicadillas (que se ponen, sí, de vez en cuando se ponen...)

Es un libro estupendo de leer. Sí, claro, cualquiera me puede decir que es como Titanic, (salvando muchas distancias...), todos sabemos cómo acaba. Pero es, de verdad, muy interesante.

Habla del tema de la mujer y lo tratan Jesús y María Magdalena. "La mujer en tu predicación deja de ser un capricho de los hombres. Y es necesario que los hombres lo asuman. Pero ese es solo el primer paso: hay que conseguir que la mujer disponga de su vida con entera libertad". Y hay algo curioso en lo que yo no me había fijado nunca: "No había un solo amigo del círculo íntimo de Jesús a quien él no hubiese elegido directamente y por su nombre. En cambio, las mujeres lo habían elegido todas a él. Nunca había llamado a ninguno ni pedido que lo acompañaran."

También hablan mucho del amor: "¿Ya te has dado cuenta, María, que cuando uno ama, en el acto mismo de amar, desaparece toda contingencia? ¿Quién piensa, cuando socorre a uno en un camino, si han pasado dos minutos o dos horas?"

Y, desde el punto de vista de María, cómo está la situación... "Cuanto más te escucho, más te admiro, pero también más temo por ti, y por tu mensaje. Mientras les des y nada tengan que darte, te seguirán embobados, pero en cuanto tengan que deberte algo, te abandonarán". "María de Magdala comprobó una vez más que el fanatismo era el peor de los males de la humanidad: no solo ofuscaba a los demás y los perseguía, sino que ofuscaba también a quien lo padecía". ¡Qué gran verdad!

¡Ah! Y también aparece Pablo, sí... eso no lo esperaba yo... Y conoce a María Magdalena... sí, muy curioso...

En fin, que lo he disfrutado mucho, la verdad. Me ha gustado mucho.

Cierro con una frase que creo que es interesante: "¿Qué sería de las gentes si no hubiera hombres que les hablaran de su Dios?"