domingo, 30 de julio de 2017

Pasaje a Tahití (Eva García Saénz de Urturi)

Ya... he encontrado otra autora que me gusta... y aquí estoy, hasta encontrar la segunda parte de la Trilogía de la Ciudad Blanca...(ya estoy en ello, que no cunda el pánico, que ya lo estoy leyendo en este momento...)

Me ha encantado. Desde el primer momento he pensado en El paraíso en la otra esquina de Mario Vargas Llosa.No se parece nada de nada la trama pero es Tahití, aparece Paul Gauguin... Y no he podido evitarlo. Aprovechando el momento, lo recomiendo para todo el que quiera leer algo maravilloso (como todo lo que escribe Vargas Llosa, claro)

Me despisto, me despisto... Esta novela es una historia familiar estupenda. Iba a decir una "saga" pero en realidad solo engloba dos generaciones, así que no podemos exagerar...

Tenemos dos familias: los Fortuny por una parte y los Kane por otra. Salen desde Baleares y coinciden en el barco a Tahití. Tenemos dos momentos de la hiatoria: final de 1899, cuando todo comienza y 1929 -1930 cuando nos encontramos con el desenlace en manos de la siguiente generación.

De los dos hermanos Fortuny, Hugo es más convencional y más pragmático y será el que vuelva después a Manacor y se dedique a las perlas. Pero Bastian es genial: aventurero, bohemio, irresponsable... Y nos lleva con su vida y su historia a conocer muchísimas cosas.

He aprendido mucho de perlas. De hecho nos cuenta que estuvo trabajando en Japón con Kokichi Mikimoto, el primero que consiguió perlas cultivadas (aunque no le salieron esféricas al principio). La historia en Japón con las ama, las buceadoras buscadoras de ostras, es maravillosa... Y me ha hecho mucha gracia su pensamiento: "...demasiadas horas acuclillado al modo japonés. Qué les costaba usar las sillas en aquel extremo del planeta"

He descubierto también que en las perlas negras de Tahití "el color se debe a las barbas oscuras, son únicas en el mundo., Pero hay que abrir catorce veces mil ostras para encontrar una perla. El negocio están en el nácar en realidad, porque no depende del azar."

Ah, y me he enterado de que "...su costumbre europea de besarse en los labios se remonta a la Época Clásica. (...) cuando los patricios romanos comprobaban si sus mujeres habían bebido vino explorando con la lengua sus labios..."

Por otro lado, tenemos a los Kane, en realidad, la que nos importa es Laia, Adelaida. Una familia también curiosa. El padre va a Tahití como cónsul inglés en Papeete, que es colonia francessa... Para hacernos una idea de cómo pensaban, voy a dejar la teoría de Ágata, su madre, en relación con los hijos no primogénitos: "Dios siempre se esmeraba al crear su primera obra, y por eso usaba barro de primera calidad. Para el resto de los hermanos utilizada el barro que quedaba. Por eso los tronos y los títulos nobiliarios los heredamos los primeros. Es ley divina." ¡Toma ya!

Nos encontramos después con Denis, el hijo de Laia, que nació en Tahití y vuelve allí tras la muerte de sus padres a encontrar sus raíces (vamos a llamarlo así). Me ha caído bien, sí, me ha caído simpático... Es el que lleva las riendas de la fábrica de perlas en Manacor y, solo por tener que aguantar a sus hermanos, merece todo mi respeto.

Tengo que dejar un párrafo que cuenta Étienne Lacascade, el gobernador de Tahití: "Un aventurero y escrito, pero pese a ello buena persona, se quedó en las Marquesas durante tres años, acogido como un hijo por los indígenas de esa isla. El tal Melville, que por lo visto se ha hecho famoso escribiendo una novela de una ballena, creo que se llama Moby Dick..." No es que tenga mayor importancia, es que mi marido está leyendo Moby Dick en todo su esplendor, las más de 800 páginas, y estoy esperando que, de un momento a otro empiece a soltar chorros de agua por la nuca...Se le está haciendo largo...

Por supuesto, a lo largo de la novela, se van aclarando cosas un poco difusas al principio, que nos permite terminar con una visión completa de la familia y de las perlas. Pero el camino es lo mejor, porque toda la historia, con sus alegrías y sus desgracias es muy fácil de seguir y muy agradable de leer. No solo es buena la historia, sino que está muy bien escrita, y eso hay que agradecérselo a la autora.

En realidad, como siempre, he dejado todo sin contar porque merece la pena explorar las páginas de este libro. No quiero contar nada..

Sí que voy a terminar con una frase para la historia. Yo no sé si a las mamis eso nos lo dicen o si solo lo pensamos pero... : "Ahora eres madre, no puedes derrumbarte"



No hay comentarios:

Publicar un comentario