sábado, 24 de octubre de 2020

La voz de los retratos (Aurora Villalba Navarro)

 Como tantas otras veces, he elegido la novela por el título. Es así, no lo puedo evitar.

Y me ha gustado bastante. Pero tengo que decir que me gusta más la primera parte que la segunda. Al final creo que se va embrollando y se complica demasiado. No me refiero a la trama, me refiero más a la propia autora. Como siempre, es una opinión personal, por supuesto, que podría haber sido diferente de haber leído la novela en otro momento.

Nuestra protagonista es Lucía Romagosa y la novela nos narra su relación con la familia Doria. Una relación de toda una vida, que comienza cuando Lucía tiene que repetir 8º EGB por haber estado enferma y le asignan a Emma Doria para la integración en el nuevo curso.

Hay que decir que el hermano de Lucía se llama Rómulo... eso seguro que tiene que marcar tu vida. Lo dejo ahí, sin más comentario.

Después de una relación muy estrecha con la familia Doria durante unos años, Lucía y Emma se distancian por diferentes razones. Pero la vida vuelve a unirlas (bueno, vuelve a unir a Lucía con los Doria) cuando Alejandra, la hermana mayor de Emma se casa e invita a Lucía a la boda.

Lucía trabaja como diseñadora de interiores y me ha encantado un comentario que le hace a Alejandra cuando la ayuda en su nueva casa: "En todas las casas hay algún obeto espantoso que a uno le regalan y no tienen más remedio que exhibir. En el estudio les llamamos «pongos»: «Dios mío, ¿dónde lo pongo?»". Es absolutamente cierto. Y para solucionarlo, las mudanzas hacen maravillas, a no ser que sean piezas de colección (lo que no es mi caso).

La familia Doria es muy especial, la verdad y cada uno de ellos es un personaje interesante. Me gusta mucho Valeria, la madre. Es una mujer mundana, pero muy reflexiva, que lleva mucho sobre sus hombros aunque no lo parece y que realmente sostiene a la familia.

Carlos, el padre, también es para tenerlo en cuenta. Yo no he llegado a conseguir que me cayera del todo bien, sin saber exactamente por qué, puesto que es un hombre encantador... Y dice cosas que se pueden tener muy en cuenta: "La vida era muy corta para andar con malas caras. Y, por favor, debía entender que a veces es preciso tomar decisiones que no nos gustaban".

Emma es peculiar, un poco niña mimada que tiene que experimentar todo en la vida y que quiere destacar como sea del resto de su familia. Y Gonzalo es un "chulo-piscinas", guaperas y con dinero, que  trea  las niñas de calle... no digo más. (No sé si ha quedado claro que no me gusta).

Otro personaje impresentable es Eduardo, el marido de Alejandra: "Alejandra pensaba que los celos eran una prueba de amor. Se mentía. El amor era generoso y los celos no suponían más que una manifestación de egoísmo". Los celos de Eduardo, claro...

Hay algunas reflexiones que nos pueden servir a cada uno de nosotros. Una de ellas me parece muy inportante: "Lo peor de no subsanar los errores a tiempo es que un error te lleva a otro y a otro y a otro peor hasta que tu vida se convierte en un error". Es como cuando dejas algo sin decir a alguien (alquien que te importa, claro): la relación empieza a girar en torno a ese vacío que ha quedado y se empieza a desmoronar.

Claro, no puedo dejar de reseñar una gran verdad: "Los bancos te ofrecen paraguas cuando hace sol y te los quitan cuando llueve". Sé que la reseña no tiene nada que ver con los bancos pero es que es verdad y hay que decirlo.

Es una novela que se lee bien y que refleja bien las relaciones interpersonales de una familia. Se puede recomendar aunque, de verdad, la última parte se me hizo un poco complicada.

Cierro con una reflexión que creo que merece la pena: "Suena simple, pero en cuestión de emociones no existen certezas, ni buenos o malos, solamente intuiciones".

La pequeña de los Hemsley (Sheryl Bowman)

 He de decir que cuando empecé a leer el libro ya sabía, más o menos, lo que me iba a encontrar, con lo que no supone ninguna sorpresa.

"Londres, 1874. Lia Hemsley es la hija menor de una de las mejores familias de la nobleza inglesa. Aunque conoce todas las reglas de la alta sociedad, es rebelde y proclive a no seguirlas. Después de dos años viviendo en París, Lia ha regresado a su ciudad con costumbres e ideas que llaman la atención de cuantos la rodean. Especialmente del mejor amigo de su hermano, Lord gabriel Bucker, marqués de Dexter"

Después de esto, cualquier puede hacerse a la idea de lo que nos va a ofrecer la novela. Pero hay que decir que es agradable de leer y que "no pide pan". No se sufre, no se padece y se entretiene uno. Es el tipo de novelas que se parece al sorbete de limón en las bodas: sirve para cambiar el sabor...

No se puede decir mucho... ni siquiera he tomado nota de reflexiones interesantes. Pero sí nos da una idea de la durísima vida de las niñas de la alta sociedad londinense de la época... ¡vaya estrés! Que si ya empieza la temporada, que si el marqués X me mira, que si mi hermano conoce al conde Y, que si me he puesto un escote medio milímetro más bajo... No sé si yo sería capaz de soportarlo.

Pero me lo he pasado bien, que ya es un punto a favor de cualquier novela.

El misterioso Mr. Brown (Agatha Christie)

 Seguimos, seguimos... otro de Agatha Christie.

En este caso no va a aparecer ni Poirot ni Miss Marple, cosa curiosa.

Vamos a ponernos en situación: "La búsqueda de unos comprometedores documentos secretos, suscritos durante la Primer Guerra Mundial y perdidos en el naufragio del Lusitania. da lugar a una lucha sin cuartel entre los servicios secretos británicos y una banda internacional que quiere utilizar los documentos como instrumento de la propaganda bolchevique. Pero en la vorágine de la guerra de espías aparecen dos jóvene, Tommy y Tuppence, dispuestos a jugarse la vida para desvelar la identidad del líder de la banda, el misterioso Mr. Brown".

Pues esta es nuestra historia, que comienza un 7 de mayo de 1915. Es muy entretenida y se pasa muy buen rato leyéndola, además de aprender un poco cómo funcionaba la sociedad europea en aquella época.

En concreto, Tuppence, la muchacha, que no sabe cómo ganarse la vida y piensa en buscar un marido que pueda mantenerla... ¡qué cosas! 

Aparecen algunos personajes muy curiosos, espías, buenos, malos... 

Llama la atención que Tommy, nuestro prota, diga: "En mi opinión - replicó Tommy - hoy en día estamos todos demasiado materializados". Ojo, que el libro se publicó en 1922... No hemos cambiado nada de nada.

Como no se puede contar nada porque desvelamos lo que pasa, voy a cerrar ya con una reflexión de Sir James: "A mi edad es probable que haya aprendido una lección «Nunca desprecies a tu enemigo»"

sábado, 17 de octubre de 2020

El confinado (Roberto Domínguez Moro)

 A ver, con ese título, en las circunstancias en las que estamos, había que darle una oportunidad a este libro, ¿verdad?

Y... bueno... no me ha disgustado pero tampoco es el mejor libro que he leído últimamente.

Nuestro protagonista es Juan, un informático nacido en 1981 que se va volviendo paranoico con el confinamiento, las medidas de higiene y de protección contra el virus. Y se obsesiona con la salud de sus vecinos y con la tos que oye a través de las paredes.

Me ha gustado cuando dice: "Los chinos llevan dos días cerrados y nadie sabe dónde se habrán metido, como tampoco se sabe dónde viven habitualmente". Y me ha gustado porque eso es algo que pensamos todos en aquel momento

Y también nos hicimos todos esta pregunta: "¿Ese ligero escozor en la garganta que noto será también un síntoma del virus?

Eso sí, me pone negra la expresioncita que ahora usa todo el mundo "Ni tan mal" ¿Pero eso qué es? ¿De dónde ha salido? A mí se me pone carne de gallina solo de escucharlo. Pero aquí, además, lo he leído y casi se me cae el libro... ¡espantoso!

He de decir que no ha sido nada de lo que esperaba. Me ha sorprendido, es cierto, pero no me ha gustado demasiado...

Y sí cierro con una pregunta que se hace el prota y que nos podríamos haber hecho cualquiera de nosotros. "¿Qué habría hecho de haberlo sabido?"

Se atormenta una vecina (David Reinoso)

 Es evidente que, con ese título, había que leerla... es absolutamente maravilloso

Y me lo he pasado muy bien con la novela, la verdad. Además, espero que no sea la última de Cobos y Ortega. Me declaro seguidora suya desde ahora mismo.

"Una mujer aparece muerta en un patio de vecinos. Cuando el inspector Cobs y su nuevo compañero, el joven y apocado Ortega, se presentan en el lugar de los hechos, se dan cuenta inmediatamente de que no fue un suicidio"

La fallecida es Maira, de 40 años... Pero luego aparece otro cuerpo, el de Amaro, otro vecino... y todo se complica un poco más.

Lo mejor, los vecinos... ¡vaya pandilla! Debe de ser un poco como el Aquí no hay quien viva (he de confesar que no he seguido la serie porque he visto algún trocito y no me gusta), con los vecinos cotilleando todo lo que pueden y metiendo la nariz donde no les llaman.

Pero es muy interesante también la vida de Ortega, que aún no llega a los 25 y del inspector Cobos, que ha sido retirado de la calle por un problema con un caso anterior y que le ha separado de su mujer y su hija.

No tengo ninguna reflexión que dejar aquí, qué curioso. No sé si estuve un poco despistada o que de verdad no aparecían reflexiones... Pero lo he pasado genial y recomiendo que se lea para pasar un rato estupendo.

Asesinato en Roma. El primer caso del cuestor Flavio Callido (Walter Astori)

 Viendo que era una novela "policíaca" en la antigua Roma, tenía que leerla. Y he de decir que me ha gustado pero también es verdad que prefiero a Marco Didio Falco, de Lindsey Davies. Eso sí, leeré más casos de Flavio Callido.

"Año 61 a.C., durante el consulado de Pisón y Corvino. Una serie de crímenes perturba la vida diaria de Roma, una ciudad de por sí caótica y repleta de conflictos políticos"-

En la nota final del autor nos enteramos de que "esta novela es una obra de ficción centrada en un hecho histórico ocurrido realmente: la muerte del tribuno de la plebe Marco Mario Gratidino"

Quinto Lutacio Cótulo, princeps senatus le encarga al cuestor Flavio Callido la resolución del caso, con el fin, no solo que atrapar al asesino, sino de tranquilizar Roma.

Lo curioso es que los crímenes que van apareciendo apuntan por el modus operandi a los sacrificios humanos que realizaban los sacerdotes de la diosa Ma.

Pero nuestro protagonista, Flavio Callido, se da cuenta de que es lo que quiere el autor de los crímenes.

Vamos a conocer también a Lutacia Domicia, que es la hija de Cátulo y que va a colaborar con el cuestor en la investigación. Y a Cayo Antonio, amigo de Flavio Callido, peculiar pero que me ha caído muy bien.

Y también aparecen personajes reales, como Cicerón, que en un determinado momento, les cuenta algo muy curioso: "... tiene una gran verruga en la nariz en forma de garbanzo, de cicer, como el lejano antepasado que debo el sobrenombre de Cicerón".

Una cosa que me gusta mucho de la novela es que se aprende mucho de la forma de vida de la antigua Roma, que es algo que me llama la atención porque me parece fascinante.

Y voy a cerrar con una reflexión de nuestro protagonista que podía aplicarse en cualquier momento: "La religión entra en la esfera íntima de las personas y lo justo es que cada uno cultive a su manera la relación con la divinidad protectora"

El negociado del yin y el yang (Eduardo Mendoza)

 Vamos a por la segunda entrega de la trilogía, después de El rey recibe. Como voy sobre seguro, me ha gustado mucho. Eduardo Mendoza me parece un escritor fabuloso y la primera parte de la trilogía ya me había parecido estupenda.

Nos encontramos en 1975, con Franco a punto de fallecer. "Estábamos despidiendo una época sin duda nefasta, pero en definitva, nuestra"

Nuestro protagonista, Rufo Batalla ya planea su regreso a Barcelona, pero recibe una "propuesta de Tadeusz Maria Clementij Tukuulo relacionada con su disparatado plan de reconquista del trono de Livonia, un país hoy inexistente". La propuesta es una misión un poco incierta en Oriente.

Y ahí empieza la historia. 

En cuanto a Rufo, "su formalidad e insatisfacción son el contrapunto perfecto del formidable príncipe Tukuulo"

Antes de marcharse de Nueva York, Anamari, la hermana de Rufo le pide que reciba a una amiga, Araceli de Castro que viaja con su tía. La tía es una verdadera sorpresa, es la abadesa de las clarisas del Real Monasterio de Santa Clara en Tordesillas. Van a pasar tan solo un par de días con Rufo pero la abadesa seguirá apareciendo a lo largo de la novela.

A lo largo de la novela Rufo va a viajar de un lado para otro, nos va a dar a conocer mejor a su familia, y su forma de ver la vida y vamos a conocer a otros personajes nuevos que son muy interesantes.

Me ha gustado lo que cuenta de las mudanzas cuando Rufo va a marcharse: "Una mudanza siempre desmoraliza a quien la hace, porque con el paso del tiempo hasta el asceta más estricto acumula gran cantidad de cachivaches". Y es muy cierto. José María Reina, el auditor que hacía habitualmente las auditorías de calidad en la empresa en la que yo trabajaba solía decir que "tres auditorías equivalen a una mudanza y tres mudanzas, a un incendio". Yo recuerdo con horror la mudanza que hicimos ya hace más de 13 años... ufffffffff.... pero no es menos cierto que siempre da mucha pena deshacerse de muchas cosas aunque uno sepa que ya no las necesita.

A lo largo de los viajes de Rufo, se encuentra con unos españoles en Tailandia que le dicen: "Si Dios no le hubiera echado del paraíso, Adán lo habría convertido en un burdel".

En fin, que es todo tan esperpéntico que no se puede contar por encima en condiciones. O uno lo lee, o no se puede resumir sin desvelar lo que no se quiere.

Así que lo dejamos aquí recomendando que se lea sí o sí. Es una de estas novelas para recomendar. Eso sí, es mejor haber leído primero la primera parte de la trilogía. Y nos toca esperar a que el autor termine la tercera parte.

Y cerramos con una reflexión interesante, que debería calar en mucha gente: "La mitad de la inteligencia es entender, la otra mitad, hacerse entender"

Sangre en la piscina (Agatha Christie)

 Seguimos con Agatha Christie, seguimos... ya lo dije...

Es otra novela como cabía esperar. Muy entretenida, con unos personajes estupendos y una trama interesantísima... Vamos, como cualquier novela de Agatha Christie.

"Lucy Angkatell invita a Hércules Poirot a comer. Para gastar una broma al detective belga, sus invitados fingen un asesinato junto a la piscian. Desgraciadamente, la víctima no interpreta ningún papel"

El que fallece es el Dr. John Chrsitou. Y nos vamos a encontrar a los personajes que están en casa de los Angkatell, que son a cada cual más especial. Hay historias entrelazadas, pasadas, presentes... vamos, que lo que parece una reunión de amigos y familiares es un jaleo de narices...

Me encanta Lucy, la anfitriona: "Porque, digan lo que digan, un asesinato siempre es embarazoso... disgusta a la servidumbre y estropea la rutina general". ¡Olé ahí! ¿Y el muerto? Bah... eso es lo de menos... lo importante es que disgusta a la servidumbre...

Ah, hay una reflexión que ya había leído más veces pero que me gusta mucho: "¿Quién era el que había dicho que la verdadera tragedua de la visa era que uno consiguiese lo que deseaba?"- A esto hay que darle siempre una vuelta porque no es ninguna tontería.

En estas novelas no se puede contar nada porque cualquier cosa destroza el final, así que lo vamos a dejar aquí. Como cualquier otra novela de Agatha Christie, hay que leerla y ya está.

Y cierro con otra reflexión muy interesante: "Y cuando el momento ha pasado, existe la tendencia a dar a las cosas una interpretación que a veces nunca han tenido"

La mujer del kimono blanco (Ana Johns)

Me llamó mucho la atención el título y decidí darle una oportunidad. Y no me arrepiento. Me ha gustado mucho. Me ha resultado un libro muy entretenido, muy agradable, en algunos momentos, muy duro y en otros, muy entrañable...

Para ponernos en situación: "Japón, 1957. El matrimonio concertado de Naoko Nakamura asegura el estatus de su familia. Pero Naoko se ha enamorado de un marinero estadounidense, un gaijin, y casarse con él provocaría una gran vergüenza a toda su familia"

Vamos a conocer a Tori Kovac, de 38 años, periodista de investigación, que está al cuidado de su padre moribundo. Cuando su padre fallece, encuentra un carta con un contenido que hace que se plantee todo lo que sabe de su padre y que su vida se tambalee. Es entonces cuando decide tirar de los pocos hilos que tiene localizados para ver si consigue montar el rompecabezas que se acaba de encontrar.

Paralelamente a la búsqueda de Tori, vamos a concocer a Naoko Nakamura y a toda su familia en el momento en le que sus padres quieren concertar su matrimonio. Esto nos va a llevar a conocer un poco más la cultura japonesa. Como a mí me parece fascinante, lo he disfrutado mucho.

La familia de Naoko es fascinante. La que más me gusta es la abuela, un personaje secundario pero fascinante. "A la abuela le gusta decir que aquello que es muy evidente puede conducir a un arrepentimiento precipitado"; "La verdad también tiene su momento. Tanto cuando llega demasiado pronto como cuando lo hace demasiado tarde, se convierte en una mentira"; "La abuela solía decir que que el hombre tiene mil planes pero el cielo solo uno". (No voy a contar más cosas,...)

Revela mucho cuál era el papel de la mujer japonesa en aquel momento. Supongo que habrá cambiado, claro, pero entonces tenía un papel completamente secundario. Aunque yo creo que era solo de puertas para afuera porque dentro de casa, eran ellas las que organizaban y dirigían.

La madre de Naoko es también maravillosa y vive por y para sus hijos. "Escoger el camino correcto es coas del destino, Escoger el camino equivocado es cosa del destino. Así que debes escoger qué amar, y estar preparada para amar lo que escojas"

Hay también una frase del padre de Tori que me ha gustado mucho y que deberíamos tener todos muy presente: "Ganar es importante, pero la forma en que ganas lo es más".

Y no puedo dejar de reseñar una frase que es la versión japonesa de lo que siempre decimos las madres. Lo que me lleva a reafirmarme en lo que siempre he pensado, que todas las madres del mundo somos iguales: "Es mejor tener el suéter y sufrir por su peso que tener carne de gallina y sufrir por el frío."

En el momento que se empieza a leer el libro, uno se da cuenta de que es un poco como otros más... una historia de un soldado americano y su relación con una chavalita japonesa. Y es cierto, sí, pero tiene una serie de cosas muy llamativas que han hecho que me guste mucho más de lo que pensaba en un primer momento.

Por supuesto, ya he contado mucho más de lo que debería, así que voy a cerrar ya, con una frase que me parece que también deberíamos tener presente en todo momento: "Preocuparse no conduce más que al dolor y te deja sin fuerzas para el día."

domingo, 4 de octubre de 2020

La venganza de Nofret (Agatha Christie)

 Ahí seguimos... pero es curioso porque es una novela de misterio que se desarrolla en el antiguo Egipto y yo no sabía que había escrito algo así.

Y es muy interesante y, además, de misterio, se aprenden cosas de una cultura que me parece impresionante.

Nos encontramos a la familia de Imhotep, que es un sacerdote viudo con grandes negocios, que viaja mucho. Tiene 3 hijos, Yahmose, Sobek e Ipy (mucho más joven) y una hija, Renisenb, que se queda viuda y vuelve a casa con su hijita Teti.

Imhotep vuelve a casa con una concubina muy joven, Nofret, que no gusta a nadie en la familia

Y empiezan a llegar las muertes en la familia...

Hay personajes muy interesantes como la esclave Henet que es una bruja y una cotilla; Kameni el escriba, que es muy majete; Hori, el administrador y mi favorita, la abuela Esa.

La novela está muy bien y nos va haciendo conocer a cada uno de los personajes y nos hace pensar si alguno de ellos podría ser el que comete los asesinatos...

Hay una reflexión de Renisenb que no quiero dejar de reseñar porque me ha hecho pensar: "(las personas) crean una puerta falsa para engañar. Si son débiles e inútiles fingen autoridad, jactancia, porder y, al cabo de algún tiempo, creen que es verdad. Lo imaginan y todos creen que son así. Pero detrás de esa puerta está la roza desnuda. Y en cuanto llega la realidad y los toca con la pluma de la verdad, el ser auténtico de cada uno se reafirma". Es curioso, muy curioso.

Ya voy a cerrar, con un pensamiento de la abuela, que ya he dicho que es mi favorita. Se lo cuenta al pequeño Ipy, que es un poco ambiciosillo (como todos los de la familia, la verdad...): "Y quiero darte una lección, mi querido nieto: las mujeres no descansamos nunca, y aprendemos, si es que no hemos nacido ya con el conocimiento, a aprovecharnos de las debilidades de los hombres". Pues ahí lo dejo...

Asesinato en el Orient Express (Agatha Christie)

Este verano ha sido el verano de Agatha Christie, sí, lo sé. Había que retomar las novelas de la reina del crimen... Me encanta.

Sí, también sé que me falta Diez negritos (o como quiera que se llame ahora) pero todo llegará.

Claro que este no es moco de pavo, ¿eh? 

Me lo he pasado fenomenal leyéndolo. ¿Qué se puede decir de Poirot que no haya dicho ya? Es de lo mejorcito... 

Poirot tiene que volver a Inglaterra en el Orient Express de forma urgemte. Conoce al norteamericano Samuel Edward Ratchett, que quiere contratarle porque teme por su vida. A Poirot no le gusta Mr. Ratchett y rechaza la propuesta. Ahora bien, el tren queda bloqueado por la nieve y... Ratchett aparece muerto.

Ahí empieza todo. M. Bouc, director de la Compagnie International des Wagons Lits, amigo de Poirot, le pide que se encargue de aclarar lo que ha pasado.

Vamos así conociendo a los diferentes pasajeros del tren, cada uno con sus peculiaridades pero, sorprendentemente, casi todos con algún móvil para desear la muerte de Ratchett. Descubrimos que Ratchett no era quien decía ser, sino un asesino de una niñita y todos los pasajeros tenían una cierta relación con la familia de la niña...

No digo más, que me pierdo.

Pero me encanta cómo se desarrollan los interrogatorios a los pasajeros y cómo funciona el razonamiento de Poirot.

Claro, cualquier novela de Agatha Christie es recomendable y esto, por supuesto, también.

Cierro con un pensamiento en francés: "Qui s'excuse, s'accuse",  que me gusta más en latín "Excusatio nin petita, accusatio manifesta"


Con el agua al cuello (Donna Leon)

Siempre que veo algo de Donna Leon que no he leído, me lo apropio... Me encanta... Lo paso realmente bien con Guido Brunetti...

Yo no conocía a Donna Leon hasta hace 9 años. Ese año me quedé sin trabajo y coincidía muchos días con una vecina de mi bloque que llevaba a sus nietos al mismo colegio al que iban mis hijos. Charlábamos de camino al cole y nos daba tiempo a charlar de muchas cosas. Y me contó que le habían reglado un libro electrónico con algún libro de Donna Leon, que le encantaba... y me surgió la curiosidad... hasta ahora.

Siempre que leo algo de esta autora me acuerdo de mi vecina. Ahora la veo muy poco, ella sale menos y la vida no la ha tratado muy bien, pero le tengo muchísimo cariño.

Bueno, que me entretengo... Una nueva entrega de Guido Brunetti y Claudia Griffoni. En este caso hay una mezcla de varios temas interesantes...

Por un lado, la historia comienza con Benedetta Toso, que está muy enferma, en su lecho de muerte y quiere hablar con Brunetti porque está convencida de que han asesinado a su marido. Aparentemente, había sido un accidente pero ella cree que no... ¿será verdad?

Todo eso nos va a llevar a enfrentarnos a la situación en la que la enfermedad tiene un coste económico tan elevado que no se puede mantener con un salario normal... sobre todo con 2 hijas de 12 y 14 años. Y, por otro lado, nos vamos a encontrar con la ética del medio ambiente... ¿vale todo? ¿si no se detecta que no cumples las normas no pasa nada?...

Es una novela muy interesante, de la que no puedo descubrir nada más, claro, como me pasa casi siempre, pero que merece la pena leer.

Nos encontramos con los personajes habituales, el vicequestore Giuseppe Patta, Claudia Griffoni y mi favorita, Elettra Zorzi, "la secretaria del vicequestore y eminencia gris de la questura". Según el propio Guido "La discreción era un hábito que llevaba soldado a los huesos".

Me ha llamado la atención la dottoresa Ricciardi, la responsable de RR.HH. de la empresa en la que trabajada el marido de Benedetta. He de decir que no me ha caído nada bien pero es que, además: "Estaba orgullosa de su uso del lenguaje complicado con el que el mundo de los negocios enmascaraba la realidad del comportamiento humano". Es algo tan rastrero... no lo soporto... enmascarar cualquier cosa en un lenguaje técnico que no permita que los profanos puedan entenderlo, me saca de quicio.

Ah. hay además otro problema en Venecia durante el tiempo en el que Brunetti tiene que enfrentarse a este caso: unas carteristas... Y me ha hecho gracia que dicen que "... los carteristas son como las frambuesas: da igual cuántas cojas, porque al día siguiente la mata está igual de llena"

Poco más, que me entretengo mucho... Aparte de la trama, que es muy buena, siempre me gusta ver cómo Brunetti lleva una vida familiar más o menos normal y piensan cosas como que "...haría falta pan para mojar en el aceite de oliva", que son cosas en las que pensamos las familias normales (eso sí, mediterráneas) en nuestro día a día.

Cierro con una frase de San Agustín: "Señor, hazme puro, pero no todavía".